Los gemelos Sola y el sueño de ser futbolista lejos de casa

Antonio y Raúl Sola dejarán Utrillas para jugar con los cadetes de F.C. Barcelona y U.E. Cornellá.

Los dos hermanos, abrazados antes de enfrentarse.
Los dos hermanos, abrazados antes de enfrentarse.
A.S.

Hay trenes que solo pasan una vez en la vida y los gemelos Sola, a pesar de su juventud, no han dudado en subirse a uno de ellos. Naturales de Utrillas y formados como futbolistas en la capital aragonesa, Antonio y Raúl abandonarán esta temporada el Real Zaragoza y el Stadium Casablanca respectivamente, para comprometerse con el F.C. Barcelona y el Cornellá.


La etapa en la categoría infantil finaliza para ambos y tras haber rechazado varias ofertas anteriormente por "no estar preparados", intentarán seguir demostrando su valía en tierras catalanas, ya como cadetes.


Antonio juega de lateral izquierdo, aunque destaca por su gran vocación ofensiva. Raúl, todo lo contrario, se desenvuelve por el flanco derecho. Ambos son habituales en las listas de las categorías inferiores de la selección aragonesa.


“Compré un coche cuando empecé a llevar a los chavales a entrenar desde Utrillas a Zaragoza y ya lleva 150.000 kilometros”, explica Antonio Sola, padre de los gemelos, quien afronta el nuevo reto “muy ilusionado” aunque “con los pies en el suelo”.


Como militar jubilado, Antonio celebra haber podido llevar a sus hijos "dos y tres veces por semana" a entrenar, ya que cualquier otro empleo no se lo hubiese permitido. "Jugué en tercera división en el Utrillas F.C., pero sufrí una grave lesión que me llevó a la retirada. Amo el fútbol y sé lo que para ellos supone", comenta.


Antonio 'junior' y Raúl comenzaron su trayectoria con solo 9 años en las filas del Giner Torrero zaragozano y pronto despertaron el interés de otros conjuntos. "Antonio fue el primero en fichar por el Real Zaragoza y, un año después, su hermano firmó con el Stadium Casabanca", explica su progenitor, y recuerda que el primero de ellos recibió la llamada del Real Madrid "cuando le vieron jugar, hace un par de años, en el Torneo de Brunete, donde quedó máximo goleador de su equipo actuando como defensa".


Según explica Sola, por aquel entonces "el Real Zaragoza no le dejó marchar" y "la familia tuvo en cuenta que quizás era demasiado pronto para un cambio de vida tan drástico".


Tras la oferta merengue, llegaron las de Villarreal, Espanyol y, finalmente la del F.C. Barcelona, que venía siguiendo al joven lateral desde hace tiempo. "Habíamos recibido varias ofertas y a pesar de que el Real Zaragoza seguía mostrándose contrario a que dejase el club, consideramos que había llegado el momento de dar el salto", indica Sola, y

añade que "Raúlito recibió a su vez la llamada del Cornellá".


Los dos jóvenes se asentarán en la Masía del F.C. Barcelona, donde acudirán al colegio y compartirán habitación. "A la hora del entrenamiento cada uno se ejercitará con su equipo, pero entendimos que era conveniente que hicieran vida diaria conjunta", avanza.


Y es que, el temor a una posible no adaptación siempre está presente. "Mi mujer y yo vivimos en Barcelona durante siete años, pero ellos no conocen la ciudad ni cómo será su nueva vida. Esperamos tener suerte y que, después de todo el esfuerzo, los muchachos puedan cumplir su sueño", concluye Sola.