VOLEIBOL

El tercer sueño

Óscar Novillo y Guille Hernán caminan por su tercera final de la Superliga que arranca mañana en Almería. Técnico y colocador hablan de los éxitos, de las claves para lograrlos y del sueño de seguir haciendo historia.

Óscar Novillo y Guille Hernán cumplen su tercer 'play off' final de la Superliga.
El tercer sueño
ANTONIO GARCíA

Óscar Novillo y Guillermo Hernán unieron sus trayectorias deportivas al CAI Teruel en 2008. Entrenador y jugador son las únicas piezas del equipo que cumplen su tercera temporada en la capital mudéjar. Y, a partir de mañana, vivirán su tercera final para optar al título del campeonato nacional, que sería el tercero, vinculado al eterno rival: el Unicaja Almería. Novillo buscó en 2008 que el proyecto tuviera un líder; Hernán se ha convertido en el faro que guía a un grupo de jugadores que apelan al orgullo y a la ambición para luchar por la tercera ensaladera de la Superliga. Ambos se citan en el teatro de los sueños de la hinchada naranja, el pabellón Los Planos, escenario de gestas con final feliz. Como el que puede cerrar una temporada histórica, tras alzar la Copa del Rey.


Óscar Novillo. La tercera final de la Superliga se ve de forma distinta porque es la primera vez que llegamos con la Copa del Rey ganada. Como todos los años, el grupo se ha renovado bastante. Aunque ya sabe lo que cada uno puede dar de sí, la incógnita es saber cuánto nos sacrificaremos teniendo ya un objetivo cumplido. Pero las sensaciones son las mismas que en las dos anteriores ediciones: el ambiente es bueno, se ve al equipo conjuntado, casi mejor que en ningún momento?


Guille Hernán. El grupo es ambicioso: los que han conseguido alguna Superliga quieren otra más; los que no, que sea la primera. Y desde este punto de vista, estamos muy comprometidos. Es normal en el ser humano que puedas relajarte por haber logrado un objetivo, pero no lo veo en este grupo. No veo que haya cambiado la actitud a la mostrada en toda la temporada.


O. N. Recuerdas cuando llegamos hace tres años. Se trataba de dar forma a un proyecto, a medio largo plazo, sin presiones. Y a la primera, en la frente: se consiguió la Liga. Y se han sucedido los éxitos, y ahora las exigencias son otras. Los distintos equipos que ha habido han respondido muy bien y, un año más, nos vemos disputando todos los títulos y con posibilidades de seguir haciendo historia. Todos los años nos hemos superado, y éste tenemos el reto de conseguir la mejor temporada de las tres desde que estamos aquí.


G. H. Para ti y para mí, la primera Superliga fue menos sorpresa que para el resto de la directiva o la afición. Creíamos más en las posibilidades de ese equipo que lo que se pensaba en el entorno. Y, ahora, somos más conscientes que el entorno de lo que conlleva ganar una Superliga, y de lo difícil que va a ser levantar un tercer título.


O. N. Ahora es posible que, en potencial, este equipo sea el mejor de los tres, pero tampoco quiere decir nada. Porque el éxito no sólo depende del nivel de rendimiento que podamos dar, sino de lo que tengamos enfrente. Unicaja Almería presenta esta campaña un equipo muy conjuntado, aunque quizás su potencial no sea como el de pasadas ediciones. No habrá sorpresas. Va a ser muy duro, aunque la gente lo ve tan cerca?


G. H. El primer año todo fue fantástico y extraordinario. Y en el segundo, Almería tenía un súper equipo; había hecho una temporada espectacular, con jugadores de renombre que jugaban muy bien. Pero no se esperaba esa final. Nosotros, apelando una vez más al orgullo y a la confianza, nos volvimos a superar.

O. N. En ese 'play off' se dio también una circunstancia que nos ayudó mucho: partíamos de víctimas. Nosotros fuimos a lo nuestro, la presión era para ellos. Llegó el primer partido, 2-3; el siguiente, 2-3? ¡Uf! A partir de ahí cayó el mito de Almería, invencible en casa.


G. H. Compromiso. Era el sentimiento del grupo. Unión. En todo eran mejor que nosotros, pero nosotros éramos más equipo. Y, ahora, es igual. Con esta plantilla es muy fácil trasladar el mensaje porque está muy implicada. El jugador tiene un compromiso con el club que ha de respetar. Pero hay una cosa más importante que presenta este equipo: que es el compromiso consigo mismo. Puede ser una postura egoísta, quiero ganar?

O. N. ...Pero ésta es la esencia del deportista de alto rendimiento Guille, que un jugador piense así.


G. H. Y, al final, arrastras a tus compañeros. Si pienso en mí, quiero ir a Almería y ganar. Regresar a Teruel, y vencer. Conquistar mi tercera Superliga. Y voy a darlo todo. Y para esto necesito a todos mis compañeros. Ésta es la actitud que reina en el vestuario.


O. N. Dentro de la confianza que siempre alimentamos, este año tenemos algo que nos facilita un poco las cosas, siempre que lo gestionemos bien: es que ya sabemos cómo ganar a Almería. Si nuestra situación no nos lleva a un exceso de confianza y somos conscientes de que va a ser duro, habremos dado un paso importante.


G. H. Creo que tenemos que seguir siendo fieles a nuestra filosofía: ir partido a partido, como salimos en la final de la Copa del Rey.


O. N. Primero el viernes; luego, el sábado. Con coraje y cabeza.


G. H. Dar otra alegría más a nuestra afición, la envidia del país, que seguro no nos fallará en Almería.


O. N. Rompimos la hegemonía de históricos. Entrar en el selecto grupo de campeones tiene mucho mérito. Y ahora ver que en tres años nos hemos hecho un hueco en la historia del voley?, tiene un mérito enorme.


G. H. Llevamos cuatro títulos en tres años. ¡Imagínate cinco en tres años! Es tremendo, pero no solo para el mundo del voleibol, para cualquier otro deporte. Qué equipo gana tres ligas consecutivas, o hace un doblete. Lo que estamos viviendo es un sueño...