El entrenador Mariano Ortega ha puesto punto y final a su compromiso con el Balonmano Aragón después de cinco temporadas tras haberse comprometido por dos años con el equipo portugués Benfica. Con esta decisión, Mariano Ortega emprende el camino que muchos otros, tanto técnicos como jugadores españoles, están recorriendo los últimos años, buscar el futuro en equipos extranjeros.

Ortega ha conseguido la permanencia deportiva de su equipo en la Liga Asobal con una excelente segunda vuelta en la que se vio obligado a emplear a numerosos jugadores de la cantera naranja tras la salida de la mayor parte de los jugadores al finalizar la primera vuelta por los problemas económicos de la entidad.

El técnico barcelonés llegó al club zaragozano en la temporada 2005/06 procedente del Ciudad Real y después de haber renunciado a ser segundo entrenador con Talant Dujshebaev.

En la pista defendió tres temporadas los colores maños y entonces decidió seguir ligado a la entidad pero sentado en el banquillo como segundo técnico junto a Veroljub Kosovac, aunque por diferentes lesiones de los componentes de la plantilla terminó la temporada de nuevo sobre la pista.

Con la salida del técnico de Esparraguera, el proyecto del Balonmano Aragón para la temporada 2014/15 sigue en el aire a la espera de solucionar los numerosos problemas económicos que acechan a la entidad y para lo que precisan unos 200.000 euros, según comentó el presidente Óscar Mainer.

Tras el último partido de la temporada ante el Ángel Ximénez-Puente Genil, que se resolvió con triunfo, Mariano Ortega se unió a las palabras de agradecimiento que en la mayoría de los casos sonaron casi a punto y final. El campeón del Mundo en Túnez 2005 recordó que acumulaban "dos años muy malos y con las esperanzas cada vez más escasas" en el capítulo económico pero "merece la pena continuar por el trabajo, ilusión y ganas que ha puesto todos".

El objetivo lo dejó claro al marcarlo en "mantener vivo el proyecto, ahora lo importante es que salga adelante y estos nueve años no se vayan al traste. Sería una lástima perderlo".