Sergio Scariolo, del Mundial de baloncesto a Huesca

De Manila a Huesca. El seleccionador nacional de baloncesto, Sergio Scariolo, ha pasado unas horas en la capital oscense para visitar a su hijo Alessandro, que esta temporada va a actuar en el Lobe Huesca La Magia. Tras la eliminación del pasado domingo en el Mundial a manos de Canadá, el técnico realizó casi de manera directa el viaje que le llevó a la ciudad aragonesa acompañado por su esposa, Blanca Ares. Ambos pasearon por sus calles y cenaron en el Café Bar Álvaro, un establecimiento hostelero muy conocido.

Scariolo también pudo ver a su hijo en acción en una de las sesiones de trabajo del martes y ha abandonado Huesca este miércoles por la mañana para proseguir con su agenda personal y profesional. El club actuó con discreción, a petición del seleccionador nacional, para evitar una exposición pública que sí se producirá en posteriores visitas del preparador.

Acudió al Peñas Center y se tomó imágenes con jugadores como el canterano Djigui Diarra, fotografía que ha publicado este miércoles en sus redes sociales. El motivo de su presencia en Huesca era tan humano y familiar como la necesidad de reencontrarse con su hijo tras un mes sin poder verlo debido a la preparación y concurso en el Campeonato del Mundo de Filipinas, Japón e Indonesia.

Alessandro Scariolo tiene 21 años y es base. Se ha incorporado este verano al Lobe Huesca La Magia para competir el curso que comenzará en octubre en la Liga LEB Plata. Formado en la cantera del Unicaja de Málaga, llega procedente del baloncesto universitario estadounidense donde ha estado jugando estas últimas temporadas compaginando la formación académica con el baloncesto en la universidad de Ouachita Tigers (Arkansas), en la NCAA Division II. El conjunto dirigido por Rafa Sanz jugará este sábado el primer amistoso de la fase de preparación, que le medirá con el Salou en un choque que se jugará a las 20.15 en el Palacio de los Deportes y a puerta cerrada.

Conforme a los criterios de

¿Por qué confiar en nosotros?