El Tecnyconta espera a Michalak

El rendimiento del alero no está respondiendo a las expectativas. Necesita dar un paso al frente.

Michalak, en el pabellón Príncipe Felipe.
Michalak, en el pabellón Príncipe Felipe.
José Miguel Marco

El Tecnyconta sigue esperando a Michal Michalak, cuyo rendimiento se ha desplomado en el tramo inicial de la competición. Lejos de progresar, su juego ha experimentado una sorprendente involución desde la pretemporada, lo que reduce drásticamente el potencial de los zaragozanos en el juego exterior. En Bilbao, en su compromiso más reciente, la aportación del escolta se redujo a sólo dos minutos y medio sobre la pista, que saldó con un punto, un rebote y una asistencia.

Desde el comienzo del curso oficial, su rendimiento no está respondiendo a las expectativas generadas. Y eso que Michalak, en los partidos de preparación, fue una de las principales armas ofensivas del cuadro aragonés. Durante la pretemporada sí evidenció una notable capacidad anotadora. Fue un jugador muy productivo, capaz de fabricarse sus propias canastas, que presentó, además, porcentajes muy elevados de tiro, especialmente desde el perímetro. Por su facilidad para jugar a campo abierto, su perfil parece ajustarse al ideario que el entrenador, Jota Cuspinera, intenta aplicar este año en la plantilla aragonesa. Sin embargo, su adaptación a la competición española se está demorando mucho más de lo previsto. «Necesito más jugadores que aporten en la rotación», advirtió el propio Cuspinera el pasado domingo, nada más consumarse la derrota en la pista del Bilbao.

Y uno de los señalados es Michal Michalak, quien sigue muy alejado de su verdadera dimensión. En Miribilla, su presencia en la pista resultó testimonial; y en sus actuaciones anteriores, tampoco ofreció el rendimiento esperado. Frente al Obradoiro –jugó un cuarto de hora–, en la jornada inaugural, y contra el Herbalife Gran Canaria –11 minutos sobre la pista–, el alero presentó un desatino inusual en cada uno de sus lanzamientos: en ambos compromisos se quedó sin anotar, tras errar sus 10 primeros tiros de campo. Mejoró algo sus prestaciones en la siguiente cita, en la pista del Real Madrid, donde facturó dos canastas de 6 intentos. En cualquier caso, registros muy pobres para un jugador distinguido, precisamente, por su facilidad para atacar el aro de su oponente.

«Algunos jugadores no hemos contribuido mucho al juego del equipo», admite el polaco, quien espera «reivindicarse con la mayor prontitud». «Si queremos pensar en ganar y llevarlo a cabo, todos los jugadores tenemos que aumentar el nivel actual y jugar mejor», añade Michalak, consciente de su escaso protagonismo. «La exigencia de la Liga Endesa es muy alta», admite el polaco sobre sus dificultades de adaptación. Pero tiene recursos suficientes para dar un paso al frente. El Tecnyconta espera con impaciencia su mejor versión.

Capacidad ofensiva

Michalak, de 23 años y 1,97 metros de estatura, se incorporó al Tecnyconta el pasado verano, procedente del Brescia, y en principio vino para reforzar la demarcación de escolta. Los posteriores fichajes de Janis Blums y Gary Neal le desplazaron a la posición de alero, donde no se desenvuelve con la misma convicción. Internacional con Polonia, Michalak inició su carrera en el Politechnika, y posteriormente actuó en el Trefl Sopot y el Polski Cukier Torun. Pero fue en el Turow Zgorzelec, el pasado ejercicio, cuando dio un importante paso adelante en su rendimiento: firmó 14,6 puntos, 4,1 rebotes y 2 asistencias de media por partido, con un 39% en los lanzamientos triples.

El Brescia, que aspiraba a colarse en los ‘play off’, contrató al polaco para la última jornada del campeonato italiano. Michalak participó en un solo encuentro, donde, sin embargo, ya evidenció su capacidad ofensiva. En ese duelo contra el Pistoia, fue el máximo anotador de su equipo, con 13 puntos –2 de 2 en triples–, al margen de aportar 2 rebotes y 2 asistencias en la media hora.

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