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La argentina Solana Sierra, primera vencedora del torneo de tenis Eva Bes

Se impone en la final a su compatriota Guillermina Naya en tres sets, por 4-6. 6-2 y 6-2

FINAL DEL TORNEO EVA BES EN EL REAL CLUB DE TENIS DE ZARAGOZA
Final del torneo Eva Bes, en el Real Club de Tenis de Zaragoza. 
Francisco Jiménez

A Solana Sierra se le adivinan posibilidades. Quizá también futuro. Se ha impuesto en la final del torneo de tenis Eva Bes a su compatriota Guillermina Naya por 4-6, 6-2 y 6-2. Se convierte así en la primera vencedora de este campeonato, disputado en las pistas del Real Zaragoza Club de Tenis, un ITF de 25.000 dólares que cumple su primera edición y que tiene vocación de permanencia y mayores retos.

Ha sido una final larga, tensa, que ha exigido de una y otra jugadora, desde el punto de vista físico y mental, más de lo que aparenta el marcador. A sus 19 años, Sierra viene como un tiro. O al menos eso aparenta. En los torneos juniors de Roland Garros y el Open USA ha llegado hasta las finales. Se trata, posiblemente, de un anuncio. De un aviso. Aunque en el mundo del tenis casi nunca nada está dicho de antemano. Esta vez, eso sí, Sierra leyó perfectamente el encuentro e interpretó bien cómo atacar las debilidades de Guillermina Naya y protegerse de sus fortalezas.

Quizá a causa de la diferencia de edad y trayectoria en el circuito internacional, Solana Sierra cedió el primer set. Cuestión de respeto. Pero después vio luz con claridad. Entendió que no podía entrar en un intercambio directo de golpes. Porque la derecha de Naya es tan rápida como demoledora, ya sea cruzada o paralela. También comprendió que debía mover a su rival de un lado a otro y abrir ángulos. Cuando Guillermina Naya se asentaba en la pista, se hacia dueña y señora del ritmo, la pista y los puntos.

Establecida su hoja de ruta, fue haciendo daño poco a poco, punto a punto. Naya se resintió en su poder, en su estado físico y hasta es probable que en sus propias convicciones. Pesaron sobre ella demasiados errores no forzados.

Trazadas estas pinceladas generales sobre el partido, es obligado decir que el torneo dio mucho más de sí. Algo se está moviendo en el tenis aragonés, en una dirección que anima a la esperanza en varios sentidos.

Se ha honrado en su tierra natal, tierra dura con los suyos, a Eva Bes, cuya trayectoria en el tenis profesional y en la WITA bien lo merecían. Como dijo Cristina García, directora general de Deportes del Gobierno de Aragón hace unos días, se trata de un referente. También se ha recuperado la memoria de María Pilar Balet, por todo cuanto ha dado a este deporte en primera persona. Por su parte, el Real Zaragoza Club de Tenis, de alguna manera, ha vuelto sobre sí mismo y ha dado una alta talla como instalación, juicio extendido entre las jugadoras. Matías Forniés ha promovido patrocinios privados indispensables. A ellos se han sumado la DGA y el Ayuntamiento. No puede olvidarse, por supuesto, a la Federación Aragonesa de tenis, presidida por Miguel Ángel Palazón, quien enseguida recogió un guante que dejó libre Marbella.

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