Toni Abadía es la tercera y última esperanza aragonesa en el Europeo de Zúrich que concluye hoy. El zaragozano compite a las 16.30 en la final de los 5.000 metros, a la que llega en un estado de forma inmejorable. «Afronto la carrera con muchísimas ganas, pero sobre todo con respeto», afirma Abadía, sabedor de la gran competencia que tendrá sobre la pista. Tras el sabor agridulce de las participaciones de las aragonesas Isabel Macías (eliminada en la clasificatoria de los 1.500 metros) y de María José Poves (decimosexta en la prueba de marcha de 20 kilómetros), Toni busca el objetivo de colarse entre los ocho primeros de la final, mirando de refilón a una posible lucha por los metales. «Es muy difícil conseguir podio, aunque sí que considero que llegando en buen estado hay que ir a intentarlo todo. Estoy con confianza y eso hay que aprovecharlo. La lucha por las medallas se puede dar, pero el objetivo sigue siendo estar entre los ocho primeros», explica Abadía. El zaragozano, entrenado por José Luis Mareca, acude a la cita continental con la octava mejor marca bajo el brazo (13:30.91).

Conseguir estar entre los ocho primeros no será tarea fácil. Enfrente tendrá al campeón de los 10.000 metros el pasado miércoles, el británico Mohamed Farah, uno de los favoritos para llevarse la prueba. Precisamente, el desgaste de los atletas que participaron en la carrera de 10.000 será, a juicio de Abadía, «una de las claves» para la cita de hoy. En ese grupo están también Andy Vernon, plata por detrás de Farah, que acude con la mejor marca de la temporada de los participantes en 5.000 (13:11.50), el belga Bashir Abdi (13:20.61) y el francés Bouabdellah Tahri, otro de los grandes favoritos con su 13:12.22. Los alemanes Gabius y Ringer, el británico Farrell y el azerbaiyano Ibrahimov, son otros de los máximos rivales del español.

Entre los contrincantes de Abadía también se encuentran Roberto Alaiz y el veterano Jesús España, que es el participante con segunda mejor marca personal de la final. Los tres se vieron las caras en el pasado Nacional disputado en Alcobendas, donde Abadía consiguió por milésimas una victoria colosal frente a sus dos compatriotas. Era el primer título nacional absoluto de su historial. Todo apunta a que los tres españoles vivirán una nueva pugna sobre la pista suiza, en la que Abadía espera un extramotivado Jesús España. Alaiz, compañero de habitación del zaragozano durante el Europeo, también quiere la revancha del pasado campeonato.

Para la cita de hoy, Abadía prefiere una carrera controlada y que no se dispare desde el principio. «Si la carrera es alocada el desgaste va a ser mayor y no estaremos cómodos», avisa el atleta del Simply Scorpio, que advierte que en estas competiciones «no siempre gana el más rápido sino el que mejor llega a la final».

El aragonés busca hoy redondear una temporada que finaliza con su pico de forma. El broche de oro a un año que tuvo su primera gran cita en el Mundial de Sopot de pista cubierta. Abadía participará en Zúrich sin ponerse límites ni obligaciones: «Con 24 años no tengo presión y hay que disfrutar».