HISTORIA

Los restos de las hijas de Ramiro I serán reinhumados en privado el 13 de enero

El estudio genético y antropológico de los Reyes de Aragón estará acabado a finales de marzoSe prepara una muestra que incluirá la reconstrucción de algunos rostros de la casa real aragonesa.

En el interior del sepulcro de doña Sancha aparecieron también restos óseos infantiles. En la imagen, detalle del sarcófago.
Los restos de las hijas de Ramiro I serán reinhumados en privado el 13 de enero
HERALDO

El estudio del ADN de los reyes de Aragón ha entrado en sus semanas decisivas. El 13 de enero, y de modo privado, el Gobierno de Aragón, que financia el estudio junto a Ibercaja, procederá a la reinhumación de los restos óseos encontrados en el sarcófago de doña Sancha en el monasterio de las Benedictinas de Jaca.


Y, así, empezará el proceso de reintegrar a sus emplazamientos originales los huesos estudiados. Según fuentes del equipo investigador, es muy probable que la presentación pública de los resultados del estudio, iniciado hace ahora tres años, tenga lugar en el mes de mayo.

Los huesos que regresarán a Jaca fueron extraídos los días 21 y 22 de mayo de 2008. La apertura del sarcófago era necesaria para ver si se podían extraer restos genéticos de Sancha, Urraca y Teresa, hijas de Ramiro I. Se pensaba que en el sarcófago podía encontrarse también el esqueleto de Guillem Beltrán, marido de doña Teresa, y el equipo de investigación ha hallado también restos óseos de cuatro niños, previsiblemente hijos de la pareja.


Todos los cráneos van a ser escaneados los días 11 y 12 de enero por la empresa ICP (Iniciativas Culturales y Publicitarias). Las imágenes, junto a las muestras genéticas, se integrarán en la base de datos que se ha creado en el ITA (Instituto Tecnológico de Aragón), lo que permitirá en el futuro nuevas investigaciones sin necesidad de volver a manipular los huesos.

Una ceremonia retrasada

Tras la reinhumación de estos restos, se procederá a hacer lo propio con los de Ramiro II el Monje y Alfonso I el Batallador, que regresarán a la capilla de San Bartolomé de la iglesia de San Pedro el Viejo de Huesca. Este acto, al que se quiere revestir de solemnidad, se anunció para el pasado mes de mayo, posteriormente se demoró al verano, y finalmente todavía no ha tenido lugar. La razón de esta demora nada tiene que ver con el equipo investigador, que completó toda su tarea hace meses. Oficialmente, se asegura que el retraso se debe a "dificultades de agenda" entre las autoridades que deben presidir el acto, dificultades que previsiblemente estarán resueltas en la segunda quincena de febrero, que es cuando tendrá lugar la ceremonia.

Quedará pendiente todavía la reinhumación de los restos encontrados en el panteón real de San Juan de la Peña, que son el 'quid' de la investigación, y en los que están centrando su trabajo los científicos. Para ello no hay de momento fecha definida, aunque se cree que sería oportuno que se realizara antes de la entrega física del estudio a la DGA, que debe tener lugar, según el convenio firmado, a finales de marzo.

Y si la entrega de los resultados debe realizarse antes del 31 de marzo, la DGA ha pedido que la presentación pública de los mismos esté acompañada de una exposición. En ella, las piezas 'estelares' serán, sin duda, las reconstrucciones de los rostros de los miembros de la casa real aragonesa que se hayan podido identificar -de ahí los escáneres de alta resolución previstos para todos los cráneos-. Esta exposición podría celebrarse en el mes de mayo, y llegaría acompañada con un libro en el que se resumirá todo el proyecto.

Identificaciones de ADN

El equipo de investigación funciona en compartimentos estancos, por especialidades, y poco ha trascendido del avance de los trabajos. Se sabe, eso sí, que el buen estado de conservación de los huesos de las hijas de Ramiro I permitió que se identificara su ADN hace ahora un par de años. Los restos que presentaban mayor dificultad, por su estado, son los que se conservaban en San Juan de la Peña aunque, según trascendió a principios de 2010, se logró identificar ADN. También existían dificultades para recuperar material genético de Alfonso I el Batallador y Ramiro II el Monje, que estaban en San Pedro el Viejo.

Los especialistas, a partir de datos y conclusiones aparentemente inconexas, tendrán que ver hasta qué punto pueden recomponer el puzle. Se sabe que el equipo, por su calidad y experiencia, va a sacar el máximo de información a los vestigios. Pero, pese a ello, las autoridades catalanas no han querido aprovechar el ofrecimiento que se les hizo desde Aragón a principios de año.

Como se recordará, la Generalitat exhumó los restos de Pedro III el Grande (se generó una gran polémica al hablar de "Pere II el Gran" y de "Corona catalanoaragonesa") y anunció que iba a realizar un estudio genético de los vestigios. La DGA ofreció su ayuda al equipo catalán, coordinado por Agustí Alcoberro, director del Museo de Historia de Cataluña. Y esa ayuda se aceptó.


Según confirmaron fuentes del propio museo, se creó una comisión mixta de seis investigadores (tres por parte catalana, otros tantos por la aragonesa), que pondrían en común sus respectivas investigaciones para avanzar juntos en el conocimiento de los restos que han llegado a nuestros días.

Por parte aragonesa se eligió a los miembros de esa comisión (Begoña Martínez Jarreta, que dirige el proyecto de investigación aragonés, junto a los antropólogos Belén Gimeno y José Ignacio Lorenzo). Pero han pasado los meses y no se ha vuelto a saber nada de esa comisión. Todo parece indicar que existe la consigna de no facilitar ningún tipo de ayuda o dato al equipo aragonés.