Decenas de niños entonan el 'Do, Re, Mi' en Zaragoza

"Soy Marta, y este martes cumplo siete años, y de regalo quiero... ¡una sombrilla rosa!", entona María, quien a sus escasos 11 años es capaz de exteriorizar toda la madera de actriz que lleva dentro. "Genial, pero pon un poco más de fuerza en la sombrilla rosa", le explica Juan José Romero, productor ejecutivo del montaje, quien tras una cámara y rodeado de apuntes ha pasado examen a las decenas de chavales inscritos en las pruebas para el musical de 'Sonrisas y Lágrimas' que se podrá ver en el Palacio de Congresos de la Expo del 11 al 15 de abril.

La cita, que ha tenido lugar en el Centro Joaquín Roncal, ha despertado la curiosidad de más de ochenta niños y, sobre todo, niñas. Los chavales, que estaban hechos un manojo de nervios, se iban animando al repasar todos juntos la letra a las puertas del auditorio.

"El examen es muy básico. Tienen que cantar el 'Do, Re, Mi' y hacer una prueba de texto asociado al personaje de Kurt, Marta o Grettel", explica Carmen Márquez, directora de casting. "Se busca que puedan entonar, que tengan ritmo, deparpajo, naturalidad y flexibilidad a la hora de interpretar personajes", señala Márquez, quien afirma que a las pruebas "suelen acudir niños con cierta experiencia, que hacen baile o canto".

Carmen, quien tras el piano acompañaba y guiaba a los niños en los test, asevera que "por norma general, los niños se apuntan al casting porque quieren, aunque alguno se nota que viene obligado", si bien estos son los menos.

Los padres, a la espera

En los pasillos del recinto esperaban los padres y madres, pensando en cómo lo estarían haciendo sus hijos. Alicia, madre de Alejandro -uno de los aspirantes a Kurt-, explicaba que la idea de que se presentara salió de ella: "Él hacía teatro, pero tuvo que dejarlo porque no tenía tiempo. Como va al conservatorio, pensé que esta era una manera de motivarle, pues quizá es algo más divertido y puede combinar música e interpretación".

Marisol es la madre de María, que se presentaba al papel de Grettel. Su hija no ha parado de ensayar, y a ello ha tenido que ayudarle todos los días. "Me sé la canción de memoria", cuenta Marisol entre risas.