El intento de asesinato de Heather Chapman, una mujer embarazada de ocho meses víctima de una brutal paliza en las inmediaciones del restaurante al que había ido a comer, hará que el equipo de forenses decida abrir una nueva investigación.

Además, Heather Chapman sufre el robo de su automóvil. Horatio y Tripp lograrán encontrar en un club a los dos delincuentes responsables del acto y, posteriormente, también descubrirán el paradero del coche.

Durante el interrogatorio, Rubén Franco, uno de los dos detenidos, confesará a los investigadores que él y su compañero Sam Novak fueron contratados para robar el Mercedes de Heather Chapman y llevarlo a un desguace.

Todo se vuelve todavía más confuso cuando Caine averigua que Josh, el hijastro adolescente de Heather, trabaja en el desguace al que deberían haber llevado el automóvil robado.