El jefe de área y el técnico del ADIF, libres con cargos tras declarar

La juez Alaya les acusa de cohecho por haber recibido regalos de Fitonovo entre 2003 y 2009 por un valor de 109.400 euros.

La juez Mercedes Alaya, que instruye el caso de la Operación Enredadera, en una foto de archivo.
El jefe de área y el técnico del ADIF, libres con cargos tras declarar
Efe

El jefe de área de mantenimiento y el técnico del Administrador de Infraestructuras Ferroviaria (ADIF) de Zaragoza involucrados en la Operación Enredadera declararon ayer en el Juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla. La juez Mercedes Alaya los dejó en libertad con cargos por un delito de cohecho al recibir, presuntamente, regalos por un valor total de 109.400 euros entre los años 2003 y 2009.


El jefe de área Juan Antonio García Pascual declaró por la mañana. Le preguntaron por los regalos que recibió, y que suman un valor total de 100.400 euros, a cambio de "facilitar los trabajos y el beneficio de Fitonovo S. L.". Los contratos que la sociedad firmó con el ADIF en Zaragoza fueron para desbrozar las vías, trabajos previstos en los planes contra incendios.


La juez Alaya preguntó al responsable del ADIF si entre las dádivas llegó a recibir pastillas de Viagra por valor de 300 y 500 euros. Así lo declaró el administrador de Fitonovo, Juan Antonio González Baró, en el mes de abril ante el mismo juzgado en el marco de la Operación Madeja (el origen de la Enredadera) de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil.


El fiscal no pidió prisión para ninguno de los dos trabajadores del ADIF de Zaragoza y la juez decretó dejarlos libres, pero con el cargo del delito de cohecho, como ocurrió la semana pasada en la comandancia de la Guardia Civil.


El técnico de la empresa pública, Miguel Ángel Muñoz, entró a testificar por la tarde con otros tres imputados procedentes de varias provincias españolas implicados en el amaño de contratos públicos con la misma empresa de Sevilla.


Tal como hizo ante la Guardia Civil, el técnico de vías se escudó en que no tenía posibilidad de firmar contratos para una empresa y así se lo dijo a la juez instructora. Asimismo, explicó que se jubiló hace cuatro años, aunque los años sobre los que investiga la UCO son entre 2003 y 2009, cuando él todavía estaba en activo.


De hecho, le preguntaron si recibió dinero en los años 2005, 2006 y 2007. El técnico negó ayer haber recibido el dinero de la empresa Fitonovo en esos años, tal como manifestó su abogado zaragozano Rafael Ariza.


Programa de contabilidad


La juez Alaya le preguntó a M

uñoz si obtuvo regalos por 9.000 euros, que es la cantidad que le imputa en el auto de procesamiento que dictó la semana pasada. Todos los pagos que remitió la empresa Fitonovo están en su caja B y anotados en un programa de contabilidad, que los acreditan.


Sin embargo, la instructora no ahondó en la relación que existía entre el técnico de vías y el jefe de área de mantenimiento del ADIF de Zaragoza.


Los imputados citados ayer eran responsables del ADIF de Zaragoza y Madrid, un exempleado de la empresa Fitonovo y un subcontratista de la misma sociedad. Se trata de los 22 que quedaron en libertad con cargos la semana pasada de los 32 detenidos por la Guardia Civil tras prestar declaración ante los agentes de la UCO. De los otros diez implicados solo decretó la prisión provisional para cuatro: los responsables del ADIF de Córdoba y Sevilla, el director de carreteras de la Diputación de Sevilla y un directivo de Fitonovo. La juez Mercedes Alaya mantiene el secreto sumarial del proceso abierto con la investigación de la Operación Enredadera, que comenzó en abril al ampliarse la Operación Madeja.