Zaragoza

El "¡Viva la Pepa!" vuelve a gritarse en Zaragoza

Los recreacionistas volvieron a tomar Zaragoza para celebrar el bicentenario de la jura de la Constitución de 1812 en la ciudad, ocurrida un año más tarde que en el resto de España debido a la invasión francesa.

La 'Pepa' vuelve a Zaragoza
La 'Pepa' vuelve a Zaragoza
VM

Los recreacionistas de los Sitios han vuelto este sábado al centro de Zaragoza para recrear la firma de la Constitución de Cádiz por parte de las autoridades aragonesas. Un acto en el que la música, los trajes de época, y el despliegue recreado ha atraído la mirada de muchos de los paseantes, que han seguido el recorrido del pasacalles desde la plaza del Pilar hasta la plaza de España.


Unas 30 personas, pertenecientes a distintas asociaciones, han organizado este acto que simboliza "el regreso de la libertad a Zaragoza tras la marcha de los franceses", según explica Luis Sorando, representante del colectivo Voluntarios de Aragón, que aportó el color y la fuerza del Batallón de Infantería Ligera aragonesa.


Junto a ellos, el Heraldo y el Alcalde portaban el retrato de Fernando VII junto con 'La Pepa'. "Para nosotros es importante ceñirnos lo máximo posible a la época", comenta Luis, que se mostraba entusiasmado con el que puede ser uno de los actos finales de celebración de los Sitios.


El 9 de julio de 1813 las tropas napoleónicas abandonaban Zaragoza  volando la última arcada del puente de Piedra para retrasar su persecución. Terminaba así una ocupación de 4 años a la que sucedió la entrada en vigor en la capital aragonesa de la Constitución aprobada por las cortes de Cádiz en 1812. 'La Pepa' llegó a Zaragoza, siendo ratificada por los poderes de la ciudad, devolviendo a Aragón a las normas españolas.


"Es emocionante ponerte en la piel de tus antepasados para celebrar actos de este tipo", explicaba Asunción, que lleva desde 2008 participando en todos los actos celebrados. "Hay que ser muy de aquí para ponerse éste traje con el calor que hace".


La comitiva, que ha finalizado su recorrido en la Plaza de España, ha cerrado la recreación con la lectura y la jura de la Constitución, devolviendo a Zaragoza 200 años más tarde los gritos de "¡Viva la Pepa!".