Denuncia que le han quitado el móvil en Zaragoza y descubren que el ladrón era él
Lo dejó olvidado en el bar donde había entrado a robar y denunció su desaparición. Es uno de los cinco detenidos por cuatro robos cometidos por distintos autores en establecimientos de Zaragoza. En uno robaron casi 5.000 euros en tabaco en un estanco.
Agentes de la Policía Nacional han detenido en las últimas semanas a un total de cinco personas como responsables de diferentes robos con fuerza en Zaragoza. A uno de ellos se le acusa también de una simulación de delito, ya que denunció la sustracción de su móvil y los agentes acabaron descubriendo que lo había dejado olvidado en un bar donde él había entrado a robar.
El grupo de Policía Judicial de la Comisaría de Arrabal inició la primera investigación a raíz de la denuncia interpuesta por este joven que manifestaba haber sido víctima de un robo en el barrio de Jesús, en el que, al parecer, le habían sustraído su teléfono.
Ese mismo día, los agentes tuvieron conocimiento de la comisión de un robo la noche anterior en un bar de la calle Baluarte Aragonés, en el que se había encontrado un teléfono móvil que no pertenecía al personal del establecimiento. Tras practicar las gestiones pertinentes, los investigadores comprobaron que el propietario de dicho teléfono era la misma persona que había denunciado su desaparición.
Las imágenes de las cámaras de seguridad de la comisaría en la que interpuso la denuncia, así como las del bar en el que se produjo el robo, concluyeron que se trataba de la misma persona, y que al darse cuenta que se había dejado el móvil en el bar, para evitar la actuación policial, había simulado ser víctima de un robo, por lo que los agentes procedieron a su inmediata detención.
La segunda investigación se centró en el robo con fuerza sucedido en un estanco en el barrio zaragozano de Movera, ocurrido a principios del mes de septiembre.
En la denuncia presentada se informaba de la sustracción de tabaco valorado en casi 5.000 euros, así como otro tipo de efectos. La imágenes de seguridad del estanco, junto con la declaración de un testigo que manifestó haber observado un vehículo con dos hombres y una mujer en las inmediaciones del local momentos antes de la comisión del robo, fueron claves para localizar y detener a uno de los varones y a la mujer implicada en el mismo, y para la identificación del tercer autor de los hechos, que en ese momento se encontraba en prisión cumpliendo pena por otros motivos.
Un tercer robo con fuerza, cometido semanas atrás en un local de negocios de la calle Matilde Sangüesa, fue esclarecido poco después. Según manifestaba el denunciante, de madrugada, un individuo logró acceder por la fuerza al lugar, apalancando las puertas de dos de las oficinas y sustrayendo del interior un teléfono móvil y dos tablets.
Los agentes, tras realizar las investigaciones necesarias, identificaron al presunto responsable y averiguaron que se trataba del mismo autor de otro robo con fuerza cometido días atrás en un establecimiento del barrio de Jesús, utilizando idéntico modus operandi, mediante un determinado sistema de forzamiento de las puertas de acceso, por lo que se procedió a su detención por ambos hechos delictivos.
Todos los detenidos quedaron en libertad con cargos tras prestar en declaración por los correspondientes Juzgados de Instrucción de Guardia.
