El recibo del agua en Zaragoza subirá hasta un 8,5% en 2024 y el de la basura, otro 29%
La tasa de veladores se incrementará para las terrazas ubicadas en la calzada. Continuarán las bonificaciones en el IBI, el ICIO y el IAE y no se cierra la puerta a la ampliación que reclama Vox.
El recibo del agua subirá hasta un 8,5% a partir del 1 de enero y el de las basuras se encarecerá otro 29%. Son las principales novedades del proyecto de ordenanzas fiscales del Ayuntamiento de Zaragoza para 2024, que también incrementará la tasa de veladores a las llamadas terrazas covid y mantendrá las bonificaciones en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) y el Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO).
Según explicó la concejala de Hacienda, Blanca Solans, la subida de la llamada tasa de saneamiento, abastecimiento y depuración obedece al encarecimiento del coste de la energía, que obligará al Consistorio a pagar 2,3 millones de euros más. Para una familia de tres miembros, la variación será de unos 12,79 euros al año, pasando de un recibo de 149,30 euros a uno 162,09, IVA no incluido. Existirán, no obstante, bonificaciones para las rentas más bajas. Aquellos hogares que ingresen un máximo de 16.900 euros experimentarán una modificación de 2,82 al aplicarse una rebaja del 73%.
Por su parte, los que tengan una renta de hasta 22.000 tendrán una bonificación del 50% y los que lleguen a un máximo de 24.200 € obtendrán una rebaja del 4,86%, teniendo que pagar en torno a 12 euros más por el agua.
Solans defendió que esta tasa "no se había actualizado desde 2010", arrastrando subidas del IPC que, en global, han encarecido el servicio un 30%. "Como los costes asociados al abastecimiento y al saneamiento han crecido más que la parte de los ingresos, que no se han tocado en 13 años, y ha habido una ineficaz política energética por parte del Gobierno central nos vemos obligados a actualizar la tarifa para hacerla más sostenible y que Zaragoza siga teniendo un agua de calidad", justificó.
Mientras, la tasa de recogida y tratamiento de residuos experimentará una de sus mayores subidas en años. La culpa, según el gobierno municipal, la tiene también "la aplicación de la ley de residuos y suelos contaminados del Ejecutivo de Pedro Sánchez", que "introduce impuestos especiales en el ámbito de los residuos en toda su trazabilidad, desde la recogida hasta la eliminación, pasando por la gestión". "Se nos obliga a repercutir todos los costes integrales del servicio y además, se impone otra obligación a los ayuntamientos: que las tarifas no sean deficitarias", manifestó la titular de Hacienda.
Para el ciudadano, esto se traducirá en unos 16 euros más al año. Será lo que tendrá que pagar un hogar medio sin acceso a bonificaciones, manteniéndose, en todo caso, las rebajas para las familias más vulnerables. Para las que ganen un máximo de 16.900, el servicio tendrá un coste cero, mientras que los que se sitúen en los 22.000 podrán acceder a descuentos del 50% y quienes se sitúen en los 24.200, a bonificaciones del 12,4%, teniendo que abonar 14 euros más por el recibo de la basura.
En cuanto a la ordenanza de veladores, el coeficiente pasará del 2,2 al 3 para las que terrazas, como consecuencia de la covid-19, ocuparon parte de la calzada y restaron espacio a la zona azul. Según explicaron desde el Ayuntamiento, el objetivo es "avanzar hacia la normalización" tras varios años marcados por los efectos de la pandemia y la subida del IPC y "estimular la implantación de terrazas con una menor afección a la movilidad peatonal y al estacionamiento de vehículos".
La subida supondrá un coste adicional para estos negocios, un impacto que la Asociación de Empresarios de Cafés y Bares analizará próximamente junto al Ayuntamiento de Zaragoza.
Donde no habrá cambios será en el IBI, que se mantendrá en el 0,4 que marca el mínimo legal. Tampoco se modificarán, a priori, las bonificaciones en el ICIO y el IAE. No obstante, el PP sigue abierto a estudiar la ampliación propuesta por Vox para llegar a un mayor número de empresas. Solans aseguró que "habrá que estudiar técnicamente la propuesta y ver si su impacto coincide con el objetivo que se persigue". "Si se ve factible, se someterá al debate correspondiente", agregó.
