sucesos

Un acosador acaba en prisión por resistencia y lesiones

Fue denunciado por agredir a personal de seguridad de dos pubs, a un policía y por acosar a una camarera.

Los espacios para perros en el parque Miraflores continúan con candado.
Los espacios para perros en el parque Miraflores continúan con candado.
Heraldo

Jesús J. L., de 29 años, se encuentra en prisión como presunto autor de delitos de atentado, resistencia, lesiones, acoso y por tener tres reclamaciones judiciales por robo con violencia e intimidación, daños y desobediencia. 

Este activo delincuente, con varios antecedentes, fue detenido el pasado lunes por la Policía que acudió para atender la llamada del personal de seguridad de un pub de María Lostal con quienes se estaba enfrentando tras ser expulsado del local por acosar a una camarera. Al parecer, no era la primera vez que se metía con la joven e incluso en días anteriores la había seguido hasta su domicilio al salir del trabajo.

Cuando los agentes llegaron encontraron a Jesús J. L. peleándose con uno de los empleados de seguridad. Al ver a la patrulla, se echó a correr hacia el parque de Miraflores y, a pesar de que le pidieron que se detuviera, continuó la carrera hasta la calle de Uncastillo, donde se escondió tras unos matorrales. 

Al verse descubierto de nuevo, emprendió la huida pero finalmente fue interceptado y detenido, no si antes ofrecer fuerte resistencia a los policías, uno de los cuales cayó al suelo y se lesionó en una mano.

Al final, Jesús J. L. fue denunciado por el empleado de seguridad del pub, por la camarera del mismo local y por el vigilante de otro bar contiguo al que también había agredido antes de montar la bronca en el primero. El arrestado fue puesto a disposición judicial, asistido por la abogada Marina Ons, y en su descargo dijo que no discutió con nadie y que fue el portero del local de María Lostal quien le dio "una torta", a la que él "no respondió". 

Aseguró que cuando huyó de la Policía lo hizo «sin pensar» y que no empujó a ninguno de los funcionarios. En su opinión, el motivo de la denuncia que luego presentaron contra él fue porque no se estuvo quieto. El juez lo dejó en libertad por esta causa, aunque lo envió a prisión por la requisitoria que pesaba sobre él. 

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