teruel
El INE sospecha del aumento del censo electoral en la localidad de Camarillas
La localidad turolense alcanzó su pico de población en 1999 con 131 habitantes, cifra que no ha dejado de caer desde entonces hasta los 84 vecinos registrados a 1 de enero de 2022.
El Instituto Nacional de Estadística (INE), responsable de elaborar el censo electoral de cara a la cita con las urnas del próximo 28 de mayo, ha fijado su mirada en una pequeña localidad de la provincia de Teruel. Las alarmas han saltado en el organismo estatal al detectar en Camarillas un "incremento de electores, significativo y no justificado", que podría esconder, como ha ocurrido en el pasado en otros municipios, el intento de algún candidato de empadronar a afines para captar votos. Su alcaldesa, Rosa Cirugeda, cree sin embargo tener una explicación que aclarará cualquier sombra de duda. "El año pasado vino una familia de 7 miembros a un pueblo de 80 personas", apunta.
De acuerdo a una instrucción de 2011 de la Junta Electoral Central, los candidatos y formaciones políticas pueden denunciar ante la Oficina del Censo Electoral, dependiente del INE, posibles irregularidades en la configuración de dicho censo. El organismo estatal recoge estas sospechas en un documento dinámico -entran y salen municipios en función de los recursos o de las aclaraciones obtenidas-, en el que esta semana figuraban 59 localidades, entre ellas Camarillas.
El INE se pone en contacto con los ayuntamientos, que disponen de un plazo para justificar las variaciones del censo que han levantado sospechas. En el caso del municipio turolense, su regidora asegura no haber recibido comunicación alguna, y descarta cualquier tipo de variación intencionada. "Somos un pueblo pequeño, que como casi todos, perdemos población, pero el año pasado llegó una familia de 7 miembros, solo veo esa explicación", comenta.
Camarillas alcanzó su pico de población en 1999 con 131 habitantes, cifra que salvo puntuales excepciones no ha dejado de caer desde entonces hasta los 84 vecinos registrados a 1 de enero de 2022, el último censo oficial. Entre esas alteraciones se aprecia un aumento reseñable en 2008 (pasó de 107 a 121 empadronados) y en 2019, año electoral (de 86 a 100).
Frente a demandas por fraude en municipios donde se aumenta el padrón con personas que realmente no residen en el municipio, Cirugeda explica que la nueva familia (un matrimonio, una hermana, su madre y tres niños) se ha afincado en la localidad. "Tienen granjas de cerdos y los niños van a la escuela", aclara.
