La punta de la crecida atraviesa la Ribera Baja sin dañar, de momento, a los cascos urbanos
Se espera que llegue a Pina de Ebro durante la mañana del miércoles, mientras que en El Burgo de Ebro ha alcanzado su máximo la noche del martes.
El punto más alto de la crecida atraviesa durante la jornada de este miércoles la Ribera Baja sin, de momento, afectar a los cascos urbanos aunque con cientos de hectáreas anegadas. Se espera que en Pina de Ebro se alcance este máximo durante la mañana del miércoles, mientras que en El Burgo de Ebro ya ha ocurrido durante la noche.
Durante la madrugada, decenas de efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y voluntarios han trabajado reforzando las motas en la ribera baja.
En el municipio de El Burgo de Ebro, por primera vez en la historia, se ha colocado una mota de refuerzo extraordinaria que ha evitado mayores daños, ya que durante la madrugada el nivel del agua estuvo a punto de rebasarla. El alcalde del municipio, Vicente Royo, explicaba que se había realizado este refuerzo de urgencia para que no llegará el agua al casco urbano, ya que veían "serias posibilidades de que ser rompiera la mota porque, desde las riadas del 2015 y 2018, la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) no ha hecho ningún mantenimiento".
Se estima que hasta 400 hectareas de cultivos hayan quedado inservibles.
Mientras, en Pina de Ebro, se espera que el punto máximo de la crecida llegue durante la mañana del miércoles. La UME trabaja en el municipio reforzando las motas y achicando agua con una bomba de extracción - esta maquinaria permite coger el agua que se filtra más cercana al río y devolverla a este-.
El presidente de la Cooperativa Agrícola de la localidad, Emilio Pardo del Cacho, confía en los trabajos realizados: "Se ha estado toda la noche reforzando motas, de momento parece que están aguantando. Hay que ser optimistas". Al igual que en El Burgo, calculan que se han anegado 400 hectáreas de cultivo, que van a resultar inservibles.
