La supresión de las bonificaciones dispara el IBI de las viviendas con menor valor hasta un 54%
Barrios como Oliver-Valdefierro, el Rabal o Las Fuentes son los más afectados por las subidas. Los inmuebles más caros se han beneficiado en muchos casos de una rebaja de la contribución.
La supresión de las bonificaciones en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) ha supuesto este año fuertes subidas del recibo para los valores catastrales más bajos, que en algunos casos llegan hasta el 54%, como le ha ocurrido a los propietarios de una vivienda del barrio Oliver-Valdefierro. Además de este distrito, otros como el Actur, el Rabal o Las Fuentes se han visto especialmente afectados por la eliminación de estos descuentos, que la ley permitía aplicar durante los tres primeros años de vigencia de la revisión catastral. Por contra, a los pisos con valores más altos, que han estado menos bonificados, se les ha congelado el tributo o incluso han sido favorecidos por rebajas notables.
Para comprender este fenómeno hay que remontarse a la actualización de los valores catastrales que entró en vigor en 2013. Con carácter general, se produjo un incremento medio del 85%, que tal y como establece la ley se reparte durante 10 años. El Ayuntamiento podía haber reducido el tipo impositivo para compensar la subida. Pero no lo hizo. Como la normativa permite bonificaciones durante los tres primeros ejercicios, el gobierno del PSOE, con el apoyo de IU y CHA, acordó aplicarlas y elevarlas conforme menor era el valor catastral, en aras de una supuesta progresividad fiscal. La oposición, del PP, avisó del efecto que supondría la supresión de las bonificaciones, pero el gobierno y sus socios hicieron caso omiso.
Los inmuebles de menos de 70.000 euros de valor catastral tuvieron una bonificación del 100%, por lo que no registraron ningún incremento del recibo en ese año ni en los dos siguientes. Conforme crecía el valor catastral decrecía el descuento, hasta llegar a las viviendas de más de 200.000 euros, que no obtuvieron ningún beneficio fiscal y sufrieron el efecto de la revisión catastral en toda su intensidad. No en vano, este tipo de viviendas ha sufrido incrementos del IBI de más de un 30% en tres años.
Ante la finalización en 2016 del periodo de bonificaciones, el Ayuntamiento de Zaragoza no tuvo más remedio que bajar el tipo impositivo para compensar el impacto del incremento de los valores y de los tres años de descuentos.En este caso, se acordó una disminución del tipo del 21,6%. Pese a esta medida, el Consistorio ya asumió que la subida media de los valores catastrales más bajos, los más bonificados, rondaría el 7%, mientras que los más altos tendrían bajadas de un 6,55%.
Pero el análisis de distintos recibos revela casos en los que la cuota se dispara. Ocurre en una vivienda de la calle de Sánchez del Cacho, en Oliver-Valdefierro, cuyo importe se eleva de 127,41 euros en 2015 a 196,57. Es un 54% de aumento. En el mismo distrito, en la calle de Séneca, los propietarios de un inmueble han visto cómo su contribución pasa de 98,34 euros en 2015 a 147,09 este año, casi un 50% de subida. En el barrio de Las Fuentes, en Rodrigo Rebolledo, hay un caso de un IBI que se dispara de 122,21 euros a 142,45, un 16,56% más. En otro piso, en la calle de Florián Rey, el salto es mayor: el recibo se eleva desde los 104,34 de 2015 a los 128,38 de este ejercicio (un 23%).
En el Rabal, en la calle de Pascuala Perié, un contribuyente ha visto cómo su recibo subía hasta los 181,42 euros, frente a los 163,69 euros de 2015 (un 10,83% más).En un inmueble de Valle de Zuriza, el IBI se ha elevado desde los 344,25 euros hasta los 370,34, un 7,5%. En el Actur, una vivienda situada en la calle de León Felipe ha sufrido un aumento del 11,44%. En Las Delicias hay casos con subidas que llegan al 6,4% (de 190,42 a 202 euros, en una vivienda de la calle de Escosura).Efecto contrario
Pero no todos los inmuebles han sufrido incrementos. Aquellos que no se vieron tan afectados por la revisión catastral o que tuvieron menos bonificaciones en los años 2013, 2014 y 2015 por tener valores más altos pudieron aprovechar la bajada del tipo impositivo y ver cómo caía su recibo. Por ejemplo, una vivienda de la avenida de la Ilustración, en Montecanal, ha tenido una importante disminución: de 418,16 a 360 euros, un 13,79%.
En Parque Venecia, en la calle de Cannaregio, una vivienda se ha ahorrado este año un 6,41% (de 150,62 a 140,98 euros), mientras que un vecino de Camino de las Torres ha visto caer su cuota del IBI un 8,91% (de 547,66 euros en 2015 a 498,88 en 2016).
