El fiscal acusa de estafa a una red criminal que trucaba taxis viejos

Diez personas que montaron un lucrativo negocio consistente en comprar taxis viejos, manipularles el cuentakilómetros y venderlos con muchos menos serán juzgadas por un delito de estafa y otro de pertenencia a una organización criminal. El grupo llegó a descontar cerca de dos millones de kilómetros a ocho turismos que otros tantos profesionales del taxi vendieron porque ya no les eran útiles para su servicio. La banda los adquirió y, tras ponerlos a nombre de miembros de la red, los sacaba a la venta en distintos portales de internet a precios muy asequibles. La trama se descubrió cuando uno de los perjudicados descubrió que el Wolkswaguen Passat que había adquirido por 3.000 euros creyendo que tenía 184.000 kilómetros resultó que realmente había hecho 555.000 durante su vida como taxi. En esta operación, el acusado, Nicolae L. R., ganó 1.500 euros más de lo pagado por él mismo unos días antes.

Según el fiscal, los acusados, entre octubre de 2014 y enero de 2015, se pusieron de acuerdo para crear un entramado en el que cada uno desempeñaba una función muy concreta. Por un lado, Conrado S. S. y Constantin O., trabajadores de los talleres de la cooperativa de taxis de Zaragoza, adquirían o mediaban en la compra de vehículos que habían dejado de prestar el servicio público. Por otro, los acusados Adelin C., Neluta V., Andrada D. I., Constantin P., Iuliana V., Alin P. y Constantin M. los compraban y los ponían a sus respectivos nombres. Después, se manipulaban los cuentakilómetros y, tras un breve periodo de tiempo en su poder, los ponían a la venta en páginas como milanuncios.com y similares. Antes, para generar confianza en quien estuviera interesado en ellos, pasaban la ITV con el kilometraje ya alterado a la baja. Por último, Adelin C. y Nicolae L. eran los encargados de gestionar la venta de los coches.