Los danzantes de Gallur y los dichos al santo
La participación y bendición de los bebés nacidos durante el último año es otra de las peculiaridades de uno de los actos más tradicionales de estas fiestas: la procesión.
Alrededor de setenta danzantes acompañaron en Gallur la procesión con los patrones, San Pedro y San Antonio, que fue seguida de cerca por cientos de personas. El momento de los dichos al santo a las puertas de la iglesia fue uno de los más destacados. "Es el más emocionante porque nadie los conoce, los prepara cada uno y se recitan de forma espontánea para recordar a personas que han fallecido, a enfermos, a exbailadores del grupo u otros temas. Siempre es una sorpresa", explicaba Alberto Cuartero, el mayoral del grupo.
La participación de los niños nacidos durante el último año en los pasacalles de los danzantes es otra de las particularidades. "Bailan con ellos en brazos durante unos minutos y los pasan bajo las peanas de los santos. Es una forma de bendecir a los recién nacidos en Gallur", añadía Cuartero.
El arzobispo de Zaragoza, Vicente Jiménez, presidió la misa, en la que también se hizo una ofrenda de frutos. Los productos recogidos se entregarán a la Hermandad del Santo Refugio. Manuel Navarro, voluntario de esta entidad, explicaba que era la primera ocasión en la que esto se planteaba en Gallur. "Hemos recogido los alimentos no perecederos y después los que se han llevado a la propia ofrenda", dijo Navarro.
Las fiestas continuarán hasta el domingo. Hoy se celebra el Día del Chocolate. Los madrugadores y aficionados a los toros disfrutarán de una chocolatada patrocinada por los comerciantes locales que se sirve durante el encierro matinal en la plaza de España.
