La principal novedad del nacimiento este año es que no se ubicará de espaldas a la fachada de la basílica del Pilar sino que, más o menos como la estructura de la Ofrenda, estará colocado mirando hacia la fuente de Goya. Frente a él se configurará un pequeño espacio para que los visitantes puedan contemplarlo con mayor comodidad y, sobre todo, para las personas con la movilidad reducida puedan acercarse sin problemas.

Como consecuencia de este ‘giro’ en el belén, habrá que reubicar el resto de los elementos del portal y, por ejemplo, el tradicional huerto también cambiará de sitio dentro de la composición. El montaje, aunque pierda superficie, alcanzará prácticamente los mil metros cuadrados y se inaugurará para el próximo puente de la Constitución, muy probablemente el viernes día 4.

Hay que tener en cuenta que los elementos y las figuras que se colocan son de propiedad municipal y las mantienen las brigadas del Consistorio, que estos días están dando los brochazos precisos a las lavanderas o al palacio de Herodes de cartón piedra para que luzcan el mejor aspecto posible. También idean cómo camuflar (principalmente dentro de piedras de ‘atrezzo’ huecas) las luces y los altavoces que indican el recorrido.

El montaje de todas las piezas –el zoco, la herrería y algunos restos arquitectónicos reales– dura aproximadamente un mes. El portal volverá a contar con vigilancia privada durante la muestra navideña, después de que en el año 2013 fuera secuestrada la figura del rey Melchor, que pesa la friolera de 15 kilos. Su Majestad de Oriente apareció dos días más tarde –en perfecto estado aunque sin su cofre de oro– en el barrio del Actur.

El Ayuntamiento también comenzó ayer a instalar las luces de Navidad por el paseo de la Independencia y la calle de Alfonso I, que tiene previsto encender a principios del mes que viene. Serán casi 5.000 bombillas (muchas de ellas led) que "no supondrán mucho gasto".