Unos 100 policías controlarán el tráfico durante las obras

Unos 100 agentes en toda la traza, 5.714 vallas con una longitud de unos 20 kilómetros, 1.500 metros de protecciones 'new jersey', 137 señales y carteles y 18 paneles informativos en los accesos de la ciudad. Estas son algunas de las cifras del operativo que prepara el Ayuntamiento de Zaragoza para paliar en la medida de lo posible las afecciones durante los 18 meses de las obras de la segunda fase del tranvía, que comienzan el día 19 de julio. Será un dispositivo mayor incluso al que se puso en marcha con motivo de la construcción del tramo entre Valdespartera y Gran Vía.

Uno de los principales despliegues será el de la Policía Local. Está previsto que se apruebe en los próximos días, pero en cualquier caso no será inferior al de la primera fase, cuando se pusieron en la calle unos 100 agentes, que trabajaron por parejas para dirigir el tráfico. El mayor esfuerzo se hará los primeros días de corte, entre el 19 de julio y finales de mes. En septiembre se volverá a reforzar la presencia policial con el inicio del curso escolar.

Según fuentes municipales, los agentes prestarán especial atención a los cruces, sobre todo al punto crítico de las obras, la plaza de Paraíso, donde confluyen unos 80.000 vehículos diarios y por donde a partir del día 19 de julio solo podrán pasar unos 25.000. Además se atenderán algunas de las zonas que pueden asumir la mayor cantidad de coches y autobuses desviados, como el paseo de María Agustín y la plaza de Europa, Echegaray y Caballero o el paseo de la Constitución.

Fuentes municipales explican que el dispositivo será mayor que en la primera fase porque el trazado es mayor: 6,8 kilómetros entre Paraíso y Parque Goya frente a los 6 justos entre Valdespartera y Gran Vía. De hecho, se van a construir tres paradas más (14 en la segunda fase frente a 11 en la primera) y serán necesarios unos 1.700 trabajadores, entre empleo directo e indirecto, frente a los 1.200 de la primera.

El servicio de Movilidad municipal será uno de los más afectados por el aumento del volumen de trabajo. En este sentido, las últimas inversiones del Ayuntamiento en materia de gestión semafórica y en el centro de control de tráfico, que no existían durante la ejecución de la primera fase, serán determinantes.

Fuentes municipales explicaron que en el centro de control se recibirán datos de forma permanente y en tiempo real de las intensidades del tráfico. Hay instalados alrededor de 1.000 detectores en toda la ciudad, además de 600 estaciones de aforo. Por otro lado, en los accesos de la ciudad se han colocado 18 paneles informativos que darán datos sobre la situación del tráfico.

Por otro lado, Tuzsa, la concesionaria del transporte urbano, reforzará las prestaciones del SAE (Sistema de Ayuda a la Explotación), que controla la posición de cada autobús en cada momento y permite regular su circulación y responder a las incidencias.

Alternativas de tráfico

Ante las dificultades que supondrá para el tráfico las restricciones en los 6,8 kilómetros de trazado en construcción, el servicio de Movilidad Urbana aconseja utilizar la Z-30 y la Z-40 para los desplazamientos entre barrios distintos para evitar el paso por el centro de la ciudad.

Otra recomendación es acceder desde el sur de la ciudad hacia el norte a través de la Z-30 y las avenidas de Gómez Laguna, Duquesa Villahermosa y avenida de Navarra. También es aconsejable el uso del segundo cinturón (Marques de la Cadena-Valle de Broto) o de los puentes de Giménez Abad, Las Fuentes, Hierro, Almozara y Tercer Milenio. Se debe evitar el paso por el puente de Santiago, que estará en obras.

En los próximos días se reabrirá el punto de información de la plaza de España y un equipo de la empresa adjudicataria estará en contacto con vecinos, comerciantes, empresarios, hosteleros, detallistas del Mercado Central, taxistas o centros educativos.