La presencia de carpas muertas alerta a los vecinos de la ribera del Ebro

Se han encontrado varias y "de todos los tamaños". La presencia de carpas muertas en la orilla del Ebro ha alertado a los vecinos de la ribera.

El episodio ha obligado al Gobierno de Aragón a tomar muestras para aclarar si han muerto por causas toxicológicas o bacteriológicas, factor que determinará si hay llevar los ejemplares a un vertedero normal o a uno protegido.

La Confederación Hidrográfica del Ebro también está al corriente del problema. Fuentes de la entidad aseguraron ayer que "no es una mortandad importante" y recalcaron que, tras haber realizado varios análisis, queda descartado que el episodio se deba a una alteración de la calidad de las aguas. "No parece que haya ninguna alerta o variación", explicaron.

El origen, a falta de un estudio en profundidad, podría estar en la falta de alimento o en el aumento de las temperaturas. No estaría, según las citadas fuentes, en la falta de oxígeno. Que los ejemplares sean tan visibles y aparezcan en la orilla puede deberse "al bajo caudal", que va camino de registrar mínimos históricos para un mes de mayo por la falta de lluvias, a excepción de las registradas ayer.

El Ayuntamiento, por su parte, ha avisado al Instituto Municipal de Salud Pública. Fuentes del Consistorio afirmaron que el gobierno conoce la situación y descartaron que la afección pueda deberse al tratamiento contra la mosca negra, posibilidad a la que apuntaban algunos vecinos. Las primeras quejas se recibieron el sábado, pero por ahora no han podido aclarar lo sucedido.

Respuesta vecinal

José Luis Ibáñez, portavoz de la asociación de vecinos Las Fuentes de Tramacastilla, vio los ejemplares muertos "entre la desembocadura del Huerva y la zona del Azud", zona en la que han aparecido la mayoría. "Había bastantes. Quizá no tengan agua suficiente, desconozco qué ha podido pasar", admitió. Aunque los primeros emergieron hace ya unos días, ayer aún seguían quedando "en los remansos". En la zona del Náutico, no en vano, todavía podían verse varios a última hora de la tarde. Del hallazgo también avisaron los vecinos de Vadorrey. Pablo Polo, secretario del colectivo vecinal, lamentó que hayan tenido que ser los vecinos quienes han retirado los animales muertos de las aguas del puerto. "Trataremos de limpiar de macrocitos las aguas para poder celebrar las próximas pruebas deportivas con dignidad", añadió.

Para Néstor Torrecilla, de Ebronautas, hay varios factores que podrían explicar el suceso. "Que haya terminado el periodo de freza puede ser uno de ellos. También podría deberse a algún vertido de la depuradora de La Almozara o tratarse de una combinación de varios", señaló. Ellos fueron quienes avisaron al Consistorio. Lo hicieron ya hace más de una semana. Ahora, las partes confían en que los análisis que se realicen arrojen "algo de luz".