El consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda del Gobierno de Aragón, José Luis Soro, se ha reunido este martes con representantes de las entidades vecinales de la avenida de Cataluña y ha ofrecido la interlocución de la DGA con el Ministerio de Interior para estudiar la posible cesión de la que aún es la carretera N-II.

Los residentes llevan más de treinta años esperando una cesión y recordando que -aunque la vía está a solo dos kilómetros de la plaza del Pilar y es un calle totalmente urbana- el Ministerio de Fomento sigue siendo el propietario. Soro pedirá a Madrid que no se discrimine a Zaragoza respecto a otras cesiones recientes (como en Sevilla, Ferrol o Pontevedra), si bien la última oferta del Gobierno fue cederla sin compensación económica.

El hipotético traspaso que se negocia desde hace años debía ir acompañado del pago al Ayuntamiento de unos 1,4 millones de euros, a pesar de que esa cantidad de Fomento solo daría para afrontar una pequeña parte de la reforma necesaria pues esta se cifra en unos 9 millones de euros.

Recientemente se ha alcanzado un acuerdo entre el área municipal de Urbanismo, la presidenta de la Junta de Distrito del Arrabal y la asociación de vecinos Ríos de Aragón y Avenida Cataluña para destinar en 2017 cerca de medio millón de euros en mejoras de un tramo de la avenida.

Concretamente, el comprendido desde el puente del Ferrocarril hasta el número 253 de la avenida de Cataluña, con una actuación consistente en la ejecución de una acera de 9 metros de anchura, de los que 4 corresponderán a una zona ajardinada.