La tradicional Feria de Cedrillas, que este fin de semana alcanza su edición número 117, conserva su dinamismo a pesar de la grave crisis que afecta al sector agrícola y ganadero. Así, al menos, lo afirmó ayer, tras el acto de inauguración oficial, el presidente de la Diputación Provincial de Teruel, Antonio Arrufat, quien destacó que el certamen "se mantiene" en su nivel de actividad tras el bajón experimentado hace dos años.

En esta edición se habrán subastado de 200 a 300 cabezas de ganado ovino y vacuno de distintas razas frente a las 700 ó 1.000 que llegaron a venderse en años más prósperos. "Pero los ganaderos más importantes siguen viniendo. Llegan a Cedrillas aquellos que tienen más peso en el sector", afirmó Arrufat. Al certamen han acudido cerca de mil ganaderos de ovino, vacuno, equino, cunícola y avícola, procedentes de provincias como Ávila, Guadalajara, Castellón, Valencia o Huesca, además de Teruel.

La Feria constituye cada año una de las mayores exposiciones de animales de granja de toda la provincia. Pueden verse conejos, ovejas, vacas, gallinas, caballos, burros y hasta palomas. En torno al certamen y fuera del recinto, se organiza un enorme mercadillo con una oferta muy variada en la que también se pueden adquirir pollos y patos. Los productos de la tierra también están presentes, como el azafrán, los quesos o el jamón.

Por ello, además de propiciar el comercio entre ganaderos, la Feria atrae a miles de personas que disfrutan viendo los animales y conociendo tradiciones del medio rural, muchas de ellas ya olvidadas. Por ejemplo, ayer hicieron su entrada en la feria una manada de bueyes y caballos que llegaron hasta Cedrillas por las vías pecuarias usadas desde hace siglos. Para hoy, está previsto un concurso de corte con motosierra, una demostración de oficios agrícolas y varias subastas de gallos, gallinas de raza serrana de Teruel y caballos.

"Vengo todos los años"

"No soy ganadero, pero vengo todos los años para ver los animales, sobre todo, los caballos, que son mi gran afición. Y veo que esta feria va a más", afirmó un visitante, Avelino Vallés, de La Vall d'Uixó (Castellón). Otro hombre, Joaquín Villalba, de Villanueva de Viver (Castellón), expresaba su agrado tras haber viajado hasta Cedrillas: "Es la primera vez que vengo. No había visto nunca una feria sobre el campo tan grande como esta y me ha gustado mucho".

El consejero de Medio Ambiente, Alfredo Boné, presente en la inauguración, afirmó que el sector primario tiene futuro y podrá remontar la crisis. Abogó por una cooperación entre el medio ambiente y la agricultura y la ganadería en lugar de caer en la confrontación.