El regreso de las 15 personas desalojadas el pasado 7 de julio de 10 viviendas de la calle Ronda de Belchite de Alcañiz por un derrumbamiento en la contigua plaza del Dean tras una tormenta se acelerará ante la constatación de que la finca que sufrió el hundimiento de una terraza no presenta daños estructurales.

Los trabajos de desescombro y limpieza de los cascotes producidos por el derrumbe de una terraza a raíz de las lluvias ha permitido determinar que el edificio no sufre ninguna afección en su estructura y no será necesario un proyecto de consolidación de la zona antes de autorizar el regreso de los desalojados.

El alcalde de Alcañiz, Miguel Ángel Esteban, explica que, al comprobar la seguridad del inmueble que sufrió el derrumbe una vez retirados los restos de la zona que se hundió, será suficiente con que los propietarios presenten un certificado redactado por un técnico competente que avale la estabilidad de la finca. La formalización de este documento se podría materializar la próxima semana, lo que abriría las puertas al regreso a sus casas de los desalojados.

Esteban se muestra optimista sobre el regreso de las 10 familias desalojadas y adelanta que la semana que viene "habrá buenas noticias" al respecto. El alcalde, que sigue personalmente la evolución del desescombro, señala que los trabajos avanzan a "buen ritmo", aunque lastrados por la complejidad del acceso al lugar del derrumbamiento. Explicó que hay que pasar por el interior de una vivienda para extraer los cascotes de la terraza.

Las 15 personas que tuvieron que dejar sus hogares como consecuencia del derrumbamiento de la terraza del número 20 de la plaza del Dean se han realojado en viviendas de familiares o masicos –en 10 casos– y en hoteles –cinco afectados– a la espera de poder volver a sus pisos. El Ayuntamiento ha habilitado un protocolo de seguridad para que los evacuados puedan regresar a sus viviendas puntualmente para recoger los objetos personales que precisen.

Miguel Ángel Esteban explica que problema generado por el derrumbe es "entre particulares", aunque el Ayuntamiento colabora con los afectados y vela por la seguridad de los vecinos.