Las obras para electrificar la línea ferroviaria entre Zaragoza y Teruel ya han llegado a la estación de la capital turolense, donde han empezado los trabajos para montar las torres que soportarán la catenaria. Adif explica en un comunicado que la actuación se encuadra en los planes para electrificar la línea hasta Sagunto (Valencia). Añade que se realizan cimentaciones para postes (ejecutadas la práctica totalidad de las 4.591 unidades), postes de electrificación (3.927 unidades), pórticos rígidos (127 unidades) y 190 kilómetros de hilo de contacto.

Esta actuación se suma a la reciente licitación de obras asociadas a la electrificación de la línea que, con una inversión de casi 38,4 millones de euros, permitirá la construcción de las subestaciones eléctricas de tracción de Cariñena y Villafranca del Campo.

Las inversiones se enmarcan en el Plan Director de la línea, con una inversión global de 450 millones de euros, con la que se mejora la infraestructura para seguir potenciando el tráfico ferroviario, especialmente de mercancías, adaptando sus parámetros a los estándares de altas prestaciones, nacionales e internacionales.

Una vez completada, la línea será interoperable, dispondrá de mayor capacidad y propiciará un incremento de las velocidades de circulación y, con ello, una reducción de los tiempos de viaje para viajeros y mercancías. Asimismo, contribuirá a la mejora de la competitividad de los servicios de carga y hará posible la circulación de trenes eléctricos -frente a la tracción diésel-, "reforzando la eficiencia y sostenibilidad del transporte."

La línea Zaragoza-Teruel-Sagunt (311 kilómetros) es "estratégica por su ubicación geográfica" para la conexión por ferrocarril entre el Mediterráneo y el Cantábrico y conecta con las áreas portuarias de Valencia y Bilbao y los nodos logísticos de Platea (Teruel), Zaragoza-Plaza y Júndiz (Vitoria).

Estas actuaciones van a contar con financiación europea a través del “Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Financiado por la Unión Europea NextGeneration de la Unión Europea. 

Una ejecución tardía

El portavoz de la Plataforma en Defensa del Ferrocarril, Jesús Bellón, ha denunciado que la electrificación va "muy lenta" y recuerda que no será operativa hasta que se construyan las dos subestaciones previstas para su alimentación en Cariñena y Villafranca del Campo y se adapten las dimensiones de los 17 túneles y los 50 pasos superiores y se equipen con el correspondiente tendido eléctrico. Advirtió de que "queda mucho trabajo pendiente" para que los trenes circulen movidos por la electricidad.

Bellón ha recordado que el proyecto en ejecución se enmarca en el Plan Director para mejorar la línea convencional, que arrastra un notable retraso sobre las previsiones iniciales, que preveían el inicio de la reforma en 2017 y la finalización en 2022. Admite que, desde el inicio, se han incorporado algunas mejoras y partidas, pero reclama más "voluntad política" para que los recursos no se destinen "a cuentagotas", lo que dilata en el tiempo la culminación de la adecuación. 

El portavoz de la Plataforma ha añadido que todas las mejoras en curso y las contempladas en el Plan Director se limitan a adecuar la línea convencional, mientras que el corredor ferroviario Cantábrico-Mediterráneo de doble vía y altas prestaciones siguen sin avanzar.

Manifiesta su preocupación porque, una vez culminado el Plan Director, centrado en reforzar el tráfico de mercancías, el Gobierno olvide "en un cajón" el eje ferroviario de altas prestaciones.