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Pedro Sánchez se compromete a "dar respuesta" a los damnificados por el incendio de Olba y San Agustín
El presidente del Gobierno visita el puesto de mando del operativo de extinción en Barracas y se reúne con los alcaldes afectados.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha comprometido a "dar respuesta en el menos plazo posible" a las demandas de los afectados por el incendio que se registra desde el pasado sábado en la confluencia de las provincias de Teruel y Castellón y que ha consumido 4.000 hectáreas de monte, 800 de ellas en las localidades turolenses de Olba y San Agustín. Sánchez ha visitado este lunes el puesto de mando del operativo contra incendios, donde se ha reunido con los alcaldes afectados y ha conocido la evolución del siniestro, totalmente estabilizado en el frente aragonés.
Pedro Sánchez ha agradecido el trabajo de los participantes en el operativo de extinción, en el que están implicadas 500 personas con 20 medios aéreos entre aviones y helicópteros. El presidente ha vinculado directamente este gran incendio, que "no es habitual" en el mes de marzo, a los efectos del cambio climático. Ha afirmado que el calentamiento global no es una teoría sino "una emergencia" real ante la que es "urgente" responder.
"El cambio climático existe y causa dramas y daños como este incendio" y la sociedad "no puede ser neutral ante los negacionistas", ha afirmado en su intervención ante los medios de comunicación tras la visita al puesto de mando. Para Sánchez, el fuego que azota desde hace cinco días a Teruel y Castellón es una "manifestación" de la crisis climática mundial.
El consejero de Agricultura, Joaquín Olona, ha corroborado la relación entre el incendio prematuro de Olba y San Agustín y el calentamiento global y ha propugnado un cambio de política forestal que pase por el aprovechamiento de la biomasa de los bosques para prevenir los incendios forestales y reducir su virulencia.
El presidente ha señalado el "compromiso" gubernalmental de intervenir en las zonas afectadas en cuanto se apaguen las llamas para reponer los servicios e instalaciones perdidas y para recuperar el paisaje, una labor que se coordinará a través de las delegaciones del Gobierno en las dos comunidades implicadas.
El fuego mantiene evacuados de sus casas a 1.500 vecinos de la provincia de Castellón, donde la evolución del siniestro es preocupante debido a las intensas rachas de viento de poniente, de hasta 70 kilómetros por hora, Sin embargo, en la vertiente turolense, la situación está estabilizada, lo que ha permitido que los 250 evacuados de Olba y San Agustín haya podido regresar a sus hogares este domingo.
Federico Martín, alcalde de Olba, ha planteado la necesidad de intervenir en los montes para reducir su peligrosidad de cara al próximo verano teniendo en cuenta el devastador incendio desatado en marzo. Martín ha advertido de que el peligro de nuevos incendios es "inminente" a medida que se aproxime el periodo estival.
El alcalde de San Agustín, Daniel Riera, ha resaltado la importancia de dar una respuesta a las tres familias del barrio de La García -el único núcleo habitado alcanzado por la llamas- que han perdido su primera residencia como consecuencia del incendio. Riera ha añadido que un ganadero de la localidad ha perdido también varias cabezas de ganado vacuno por el fuego.
El presidente de la comarca de Gúdar-Javalambre, Ángel Gracia, ha recordado que esta institución aporta apoyo a los damnificados a través de los servicios sociales y de acompañamiento psicológico.
