La asociación ortodoxa que recibió San Miguel admite que no puede restaurar el templo

La iglesia, cedida por el Ayuntamiento por 90 años, podría volver a manos municipales y deberá ser consolidada ante el peligro de derrumbamiento

La asociación de rumanos ortodoxos ‘San Nichifor el Confesor’ no dispone de recursos económicos ni tiene expectativas de conseguirlos a corto plazo para afrontar la urgente consolidación de la iglesia de San Miguel, cedida por el Ayuntamiento en 2010 por 90 años con el compromiso de que se rehabilitara como centro religioso y cultural. Representantes de la entidad receptora comunicaron recientemente a responsables municipales que no cuentan con los fondos precisos para garantizar la estabilidad del templo y mucho menos para afrontar su restauración integral.


Los representantes de ‘San Nichifor el Confesor’ admitieron la posibilidad de devolver el templo al Ayuntamiento ante la dificultad de encontrar financiación para restaurarlo. Aunque han buscado ayudas de la Unión Europea y también en la propia Rumania, sus contactos han sido infructuosos. Señalaron, no obstante, que la decisión de reversión de la iglesia al Ayuntamiento la deberá tomar la junta general de socios.


La concejala de Contratación y Patrimonio, Emma Buj, abrió las puertas a la devolución de la iglesia a manos municipales vista la imposibilidad de su restauración por la asociación ortodoxa. Buj trasladó a los representantes de ‘San Nichifor el Confesor’ la "preocupación" municipal por el grave deterioro arquitectónico del monumento, un edifico del siglo XVIIIen desuso desde hace más de cuarenta años. La edil añadió que lo más urgente ahora es hacer las obras necesarias para mantener el pie el inmueble y solo más adelante y cuando la situación económica lo permita se abordará la rehabilitación para darle un nuevo uso.


El Ayuntamiento publicó en el Boletín Oficial de la Provincial el pasado día 27 de agosto un anuncio que daba a ‘San Nichifor el Confesor’ un mes de plazo para presentar un proyecto de afianzamiento de la iglesia de San Miguel. Según la Gerencia de Urbanismo, el edificio requiere con carácter urgente obras de recalce de los cimientos y el atirantamiento de los pilares para seguir en pie. El proyecto de rehabilitación integral elaborado por encargo de la asociación beneficiaria de la cesión ascendía a tres millones de euros, aunque consideraba urgente una obra de consolidación presupuestada en 419.000 euros, que no se llegó a iniciar.


Emma Buj trasladó a los representantes de ‘San Nichifor el Confesor’ en la reunión que mantuvieron el pasado jueves la preocupación municipal por el grave estado arquitectónico del templo y por las responsabilidades que se derivarían de un agravamiento de su situación. Buj señaló que si la asociación se ve forzada a renunciar a la cesión por falta de financiación para intervenir, el Ayuntamiento aceptaría la reversión. El templo fue adquirido al Obispado por el Consistorio en 2002 por 279.000 euros con el propósito de darle un uso cultural, aunque acabó cedido al colectivo rumano.