LA CRISIS AFECTA A LOS JÓVENES

Más ayudas para salir que para quedarse

Una beca para estudiar o trabajar fuera es la mejor opción para los jóvenes que quieran dejar de vivir con sus padres y no cuenten con los recursos económicos necesarios. Si se quieren quedar en la Comunidad, solo tienen la Renta Básica de Emancipación.

Para los jóvenes, es más fácil empanciparse fuera de Aragón
Para los jóvenes, es más fácil empanciparse fuera de Aragón
JOSé MIGUEL MARCO

Salir de casa para un joven aragonés es cada vez más complicado. En la comunidad, solo el 30% de los menores de 30 años están emancipados. El resto no se lo puede permitir, un 20% porque están en paro y el resto porque no ganan lo suficiente como para pagar una vivienda por sí solos y dependen de su familia.


Desde hace algunos meses fueron canceladas las ayudas oficiales al alquiler en Aragón y los jóvenes solo tienen una opción si quieren una ayuda para una vivienda en su ciudad, la Renta Básica de Emancipación (RBE). Por eso, la posibilidad más factible para los que quieren vivir fuera de casa es la de irse al extranjero, a trabajar o a estudiar.


En los dos últimos años, 1.800 aragoneses han salido al extranjero para buscar trabajo. A través de EURES, más de tres mil aragoneses buscaron un empleo en algún país de Europa, muchos de los interesados eran jóvenes.


Y solo en 2010, la Universidad de Zaragoza gestionó 4.748 becas, algunas convocadas por el propio centro y otras por el ministerio de Educación. En esa cifra no se han contabilizado las convocatorias de movilidad ni las que publican los colegios mayores, que ofrecen un catálogo muy completo de opciones para estudiar e investigar en el extranjero.


La Administración del Estado también convoca becas para posgrados e investigación en centros internaciones. El Gobierno de Aragón, además, tiene convenios con el Colegio de Europa de Brujas, el Instituto Europa de la Universidad del Sarre y la Fundación Colegio Europeo de Parma.


El año pasado, las ayudas al alquiler beneficiaron a 1.200 personas, y la DGA suspendió las ayudas en verano porque los fondos estaban agotados por «la gran demanda» que había, como en su momento afirmó Julio Tejedor, director general de Vivienda del Gobierno de Aragón.


En cuanto a los que optaron por la RBE, solo 325 de los 1.300 que la solicitaron en el Instituto Aragónes de la Juventud (IAJ), recibieron esa ayuda en 2010. Otros 588 jóvenes, que la gestionaron directamente con la DGA, también recibieron una respuesta positiva.


En el IAJ incluso se ha creado una página web, que tiene como objetivo guiar a los jóvenes de la comundiad que quieran emanciparse, con información sobre la RBE, pero sobre todo con ofertas de trabajo y becas de estudio, tanto dentro como fuera de Aragón.


Estas ayudas son imprescindibles para la mayoría, ya que sin ellas los jóvenes aragoneses deben invertir, en promedio, el 40% de su renta en  vivienda. Gracias a esos 210 euros (o menos), según datos del ministerio de Fomento, el porcentaje de ese gasto baja hasta el 21%.