El Gobierno de Aragón defiende que el proceso de comarcalización crea puestos de trabajo, vertebra el territorio y mejora la prestación de servicios. Las comarcas presupuestaron el año pasado un total de 146,6 millones de euros, de los que el 38%, unos 56,1 millones se destinaron a personal. Algunas demarcación, como Monegros, elevó este porcentaje hasta el 64%.

Desde el Ejecutivo insisten en las bondades del proceso comarcalizador y las mejoras en la prestación de servicios que se han producido desde su puesta en marcha. "Han desarrollado servicios más ajustados al territorio y que responden en mayor medida a las demandas de los vecinos, tanto en las materias transferidas y dotadas económicamente, como en otras que aún no les han sido transferidas y para las que dedican recursos propios", explican. Y en esta línea, justifican la necesidad de disponer de un elevado número de trabajadores para prestarlos y cubrir las necesidades de toda la población. De hecho, unos 1.800 empleados de estas administraciones se dedican a prestar servicios, mientras apenas 350 acometen labores administrativas.

A la espera de la transferencia del segundo paquete de competencias, las comarcas desarrollan servicios sociales, culturales, de patrimonio y tradiciones populares, deporte, juventud, promoción del turismo, de recogida y tratamiento de residuos urbanos, protección civil y prevención y extición de incendios. Todos se desarrollan con plena autonomía y sin que haya duplicidad. Además, tal y como destacan desde la DGA, llegan a todos los ciudadanos "con independencia de que en su pueblo vivan 100 o 2.000 vecinos". Según datos del Gobierno de Aragón, acción social supone una media del 36% ejecutado por las comarcas; residuos sólidos urbanos, un 18,4%; y turismo, un 13,1%.

Además, indican que los servicios han experimentado "una mejora objetiva", con dos ejemplos, el servicio de ayuda a domicilio y el deporte base. En el primer caso, según datos del Ejecutivo, unos 900 trabajadores "garantizan una cobertura total", unos 30 por comarca. Las actividades deportivas proyectadas han conseguido que la mitad de la población utilice estos servicios y practiquen algún deporte. Para prestarlos trabajan 240 profesionales, unos siete por demarcación.

Estas mejorías las achacan fundamentalmente "a la cercanía de los políticos y gestores de las necesidades sociales y a la presión que ejerce la sociedad sobre las instituciones por su cercanía, mayor conocimiento y accesibilidad".

Fuentes del Departamento de Política Territorial recordaron, además, que este proceso ha servido para "intentar corregir los desequilibrios territoriales" que genera por ejemplo, que 386 municipios de Aragón (hay 731) tengan menos de 250 habitantes o que el 85% de estos estén habitados por menos de 1.000 habitantes y tengan una densidad de población de 3,1 habitantes por km2.

La DGA destinó en 2009 un total de 63,8 millones de euros a las comarcas para que afrontaran los gastos por las competencias transferidas. En 2010, esta cifra se reduce un 9,7%, por lo que estas administraciones dispondrán de 57,6 millones de euros para prestar los mismos servicios.

Precisamente, la Federación Aragonesa, de Municipios, Comarcas y Provincias envió sendas cartas a los consejeros de Economía, Alberto Larraz, y de Política Territorial, Rogelio Silva, para manifestarles su preocupación por el recorte de este año. Su presidente, Salvador Plana, recordó que desde la puesta en marcha de las comarcas no se ha incrementado su financiación, ni siquiera se ha actualizado con el incremento del IPC, "lo que ha supuesto una pérdida de capacidad económica comarcal y la quiebra del principio de suficiencia financiera", y exige que se mantenga el montante de 2009.