Adjudicadas las dos últimas grandes depuradoras del Pirineo 

Las de Aínsa y Boltaña son las únicas que quedaban en municipios de más de 2.000 habitantes equivalentes.

La crecida del Cinca, en Aínsa.
Aínsa dejará de verter sus aguas residuales al río Cinca.
José Luis Bergua.

El Plan Integral de Depuración del Pirineo sigue avanzando con la adjudicación de las dos últimas plantas que quedaban pendientes en municipios de más de 2.000 habitantes equivalentes. Al contrato de la estación de Villanúa hace unas semanas, se suman ahora las de Aínsa y Boltaña.

La de Aínsa la construirá la UTE Compañía Obras Públicas Hormigones y Asfaltos S. L. U. y Ciclagua S. A., por un importe de 7.358.000 euros (sin IVA). Ha sido la seleccionada por el Instituto Aragonés del Agua (IAA) entre 15 ofertas que concurrieron a la licitación. Los trabajos se prolongarán 38 meses y luego la misma empresa se hará cargo de su explotación otros dos años, según las condiciones establecidas en el pliego.

El Instituto del Agua también ha propuesto ya la adjudicación de la planta de Boltaña-Margugued. De su construcción se hará cargo la UTE Gestión de Infraestructuras Civiles S. A.-Sociedad de Fomento Agrícola Castellonense S. A. Esta no fue la primera seleccionada por la Mesa de Contratación. Inicialmente ganó el concurso la unión temporal Elecnor Servicios y Proyectos-Audeca, pero renunció al haber recibido también el encargo de las obras de Villanúa. Justificó que ambos contratos iban a coincidir en el tiempo y suponían una alta carga de trabajo.

La Mesa de Contratación aceptó su renuncia y designó a la empresa que había quedado en segundo lugar en la puntuación, que ofertó 5.080.082 millones (sin IVA) para la ejecución de la obra (tiene 35 meses de plazo) y 283.132 euros para la explotación (durante los primeros 24 meses).

A partir de ahora, el Instituto Aragonés del Agua iniciará el proceso para la licitación en este 2024 de siete plantas más, de menores dimensiones, en Broto, Bielsa, Fiscal, Astún, Canfranc Pueblo, Castiello de Jaca y Piedrafita de Jaca. Con ellas, se prevé completar el Plan Integral de Depuración del Pirineo en 2027, que en total contempla 19 actuaciones en grandes municipios y 90 en pequeños núcleos. En esa fecha solo quedarán pendientes las poblaciones de menos de 65 habitantes censados.

Las plantas del Pirineo, declaradas de interés general desde los años 90 al estar situadas en la cabecera de los ríos, suponen el grueso del Plan Aragonés de Saneamiento y Depuración diseñado para el periodo 2022-2027 y se llevan buena parte de los 142 millones de euros de inversión previstos. La finalización de las actuaciones en el Alto Aragón suponen 104 millones del total: 78, 6 para las depuradoras con más de 1.000 habitantes equivalentes, y 25,4 para las de menos.

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