Muere Álvaro Calvo, exdelegado del Gobierno de Aragón en Huesca
Formó parte de las Cortes preautonómicas y estuvo en la UCD y luego en el PAR. Se definía como un político de centro y aragonesista.
Álvaro Calvo Rapún, que fuera delegado territorial del Gobierno de Aragón en Huesca durante 12 años y cuya trayectoria política se remonta a los tiempos de la Transición, ha fallecido este viernes a los 84 años en la localidad de Santa Eulalia la Mayor, a pocos kilómetros de la capital oscense, donde tenía fijada su residencia.
Calvo estaba casado y era padre de cuatro hijos. El funeral se celebrará mañana a las 16.30 en la Real y Parroquial Basílica de San Lorenzo.
Álvaro Calvo nació en Sabiñánigo y se trasladó a Huesca con su familia siendo un niño. Estudió Derecho, pero se dedicó al mundo empresarial y agrícola y durante años siguió gestionando un patrimonio rústico “de rabioso secano”, como decía él.
Cuando llegaba el calor se trasladaba a su casa de Santa Eulalia la Mayor, cerca del pantano de Vadiello, desde donde viajaba a Huesca cada día. Precisamente una de sus preocupaciones era el tema del agua. “Resulta inexplicable que haya pueblos y ciudades sin agua al pie del Pirineo”, comentaba en una entrevista.
Su carrera política empezó en la Transición, moviéndose siempre en el centro del espectro político -si hay algo que aborrecía era el “radicalismo”-. Formó parte de las Cortes preautonómicas y estuvo en la UCD hasta 1983: cuando el partido de Suárez se hundió, el “batacazo” fue tal que decidió irse a casa.
Como muchos, volvió a ser tentado por el gusanillo de la política. Para él, el camino natural de los cargos públicos de la UCD (800 concejales en la provincia) era el PAR, en el que empezó a militar en 1988.
Fue nombrado delegado territorial del Gobierno de Aragón en Huesca en 1999 y ejerció este cargo hasta 2011 durante varios de los mandatos de coalición entre el PSOE y el PAR. Bajo su responsabilidad tenía a todos los servicios provinciales de la administración autonómica. "Con el PP ya nos entendimos hace 8 años pero entonces pensó que nos podía fagocitar. Somos un partido para colaborar, para ayudar a gobernar, y lo estamos haciendo con el PSOE, con el que nos encontramos enormemente a gusto. Hay un gran respeto entre los dos y creo que jamás una coalición ha funcionado, tanto en las Cortes como en el Gobierno, con tanta fluidez y compenetración. No funcionó así con el PP", dijo cuando ya llevaba unos años de mandato .
