Autorizan a Benasque hacer sondeos para aclarar si es viable o no reabrir el balneario
El Ayuntamiento espera que sean positivos porque la rehabilitación del complejo, valorada en unos 7 millones de euros, "ayudaría a desestacionalizar el turismo".
El Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga) ha autorizado al Ayuntamiento de Benasque a hacer sondeos de investigación hidrogeológica en el entorno del Balneario de los Baños. El fin es aclarar si existe suficiente caudal de aguas minero-medicinales como para que sea viable económicamente emprender la rehabilitación del histórico complejo, que lleva cuatro años cerrado y en pésimas condiciones por el vandalismo y el pillaje y que es el de mayor altitud del país a 1.720 m. La operación costaría unos siete millones de euros.
Los permisos fueron tramitados por la anterior corporación, con el PAR al frente, y la actual, con el PP, mantiene los mismos planes ya que la rehabilitación del balneario era una de sus promesas electorales. El alcalde, Manuel Mora, critica que en su día no se hiciera nada para impedir el cierre "cuando era un establecimiento que, con carencias, funcionaba de junio a octubre, daba trabajo a unas veinte personas y tenía su público".
No obstante, destaca la importancia que tiene ahora conocer si hay suficiente caudal "porque sin eso no podemos evaluar la dimensión de una futura explotación". Además, remarca que aprovecharían el excedente de agua caliente para calefactar el edificio y cumplir así con los criterios actuales de eficiencia energética.
Mora está convencido de que este proyecto "nos ayudaría muchísimo a desestacionalizar el turismo porque al final el termalismo no conoce de épocas del año y haría que las temporadas bajas no lo fueran tanto».
Si los sondeos resultan positivos, solicitarán fondos a la DGA, a la DPH, al Gobierno central a través del 2% cultural "y a todos los que se nos ocurran", asegura.
Lo que descarta es transportar el agua hasta Benasque para construir allí otro balneario "porque el agua perdería propiedades y no tendría sentido adquirir otro edificio cuando ya tenemos uno de propiedad municipal", resalta.
El origen de las termas se remonta a la época romana, aunque fue en 1801 cuando se empezó a levantar un complejo hotelero que fue arrasado en la Guerra Civil y reconstruido en los años 50. El Ayuntamiento es el titular del aprovechamiento de las aguas desde hace cuatro décadas, aunque ya fueron declaradas minero-medicinales en 1967 dentro de un área asociada de 49 hectáreas.
El proyecto autorizado ahora por el Inaga pretende realizar dos perforaciones mediante rotopercusión directa con circulación de aire, agua y espumante (100% biodegradable) hasta una profundidad aproximada de 200 m para determinar si se puede aumentar el caudal actual sin que se pierdan las características físico-químicas.
Entre 31 y 36 grados de temperatura
Las instalaciones actuales cuentan con varias fuentes: el manantial de las piscinas; el del lavadero; el de las Opiladas, San Cosme y San Marcial; y el de las Bañeras. Estas surgencias aportan solo 3,02 litros por segundo, con temperaturas de entre los 31,1 y los 36,3 grados.
El Inaga ha aprobado la evaluación de impacto ambiental simplificada porque las afecciones a los espacios naturales del Parque Posets-Maladeta y la Red Natura 2000 son "poco significativas"; y tampoco tiene afecciones relevantes sobre la vegetación, la fauna, el suelo y el paisaje; además de por la incorporación de medidas preventivas y correctoras y el uso reducido de recursos naturales.
Con todo, el Ayuntamiento también necesitará el informe favorable del Parque Natural ya que la actuación se lleva a cabo en la zona periférica, algo que el alcalde espera obtener sin problemas.
El Inaga sí exige que estos sondeos, que durarán un mes, se hagan fuera del período reproductivo del quebrantahuesos y del urogallo, entre agosto y noviembre. El Consistorio confía en poder licitar rápido los trabajos para poder ajustarse a este período temporal.
