El secadero de Grañén invertirá un millón de euros en mejorar la línea de forrajes y crear un parque fotovoltaico

El objetivo es aumentar la capacidad de producción y reducir el consumo eléctrico recurriendo a energías renovables.

Las inversiones en el secadero de Grañén mejorarán su capacidad de producción.
Las inversiones en el secadero de Grañén mejorarán su capacidad de producción.
Javier Navarro

El secadero de cereales Santiago de Grañén invertirá más de un millón de euros en la mejora y modernización de sus instalaciones así como en la creación de un parque fotovoltaico de 800 kilovatios. Las actuaciones, que fueron aprobadas por unanimidad en la última asamblea extraordinaria, entrarán en funcionamiento durante la primavera de 2023.

Además de optimizar recursos y reducir costes, apostando por las energías renovables, las nuevas inversiones buscan incrementar la capacidad de sus actuales instalaciones con el fin de absorber el aumento de la producción agraria previsto en la zona norte de Los Monegros, donde ya están en marcha varios proyectos de modernización que llegarán a duplicar el volumen de trabajo de las empresas de transformación del territorio. 

Del conjunto, destaca la instalación de un nuevo tubo de enfriamiento en la línea de deshidratación de forrajes, que permitirá incrementar la producción actual hasta las 24 toneladas a la hora así como mejorar la calidad del producto final, según ha detallado el gerente del secadero de cereales Santiago de Grañén, Mariano Ordás. En este caso, la inversión será de 540.000 euros y de cumplirse lo previsto, entrará en funcionamiento en abril de 2023.

A esta mejora, se unen las inversiones ya ejecutadas en la misma línea de producción, con la adquisición e instalación de una nueva prensa empacadora y la renovación del sistema de automatización de la fábrica deshidratadora. En este 2022, también se procedió a la construcción de un vial de acceso al secadero y además, entraron en uso las nuevas zonas de almacenaje con el fin de ampliar la capacidad de recogida del producto. A lo largo de los dos últimos años, la inversión ya rondó los 1,1 millones.

Placas solares para autoconsumo

Por otro lado, y con el fin de reducir la factura eléctrica y apostar por la producción de energía verde, los socios del secadero monegrino aprobaron la construcción de un parque fotovoltaico, que tendrá una potencia de 800 kilovatios. En una primera fase, se destinará al funcionamiento de sus propias instalaciones y en total, permitirá cubrir una tercera parte de la energía que consumen. Más adelante se plantearán la posibilidad de vender excedentes. Las placas se instalarán en unas fincas laterales, que están situadas junto a la fábrica y que forman parte de la partida Mocorón. Las parcelas fueron adquiridas de forma reciente. El proyecto, que apuesta por la sostenibilidad, supone una inversión de alrededor de 450.000 euros. El objetivo es que esté en funcionamiento entre mayo y junio de 2023.

Al margen de las nuevas inversiones, la última asamblea extraordinaria también permitió aprobar la reactivación y regulación de la sección de crédito de esta sociedad agraria de transformación, que volverá a cumplir su función de banco después de casi ocho años de inactividad. Según Ordás, la recuperación de este servicio beneficiará a los socios, que podrán sacar rendimiento a su capital a través de diferentes plazos fijos, y a la propia SAT, que dispondrá de activo para sus operaciones e inversiones. En este 2022, el secadero, que ronda el centenar de socios, celebra su 50 aniversario.

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