El Regimiento Galicia 64 celebra la festividad de la Inmaculada Concepción con una parada militar
El acto militar ha finalizado con un desfile por las calles de Jaca, que ha sido muy aplaudido por la gran cantidad de público asistente, a pesar de la lluvia.
El Regimiento de Infantería Galicia 64 de Cazadores de Montaña de Jaca ha celebrado este jueves la festividad de la Inmaculada Concepción, Patrona de la Infantería Española, con un acto en la Ciudadela de Jaca y el posterior desfile por las calles de la ciudad.
La parada militar ha estado presidida por el General Jefe de la División ‘San Marcial’ Juan Carlos González Díez. Durante el acto se ha leído un fragmento histórico relatando el Milagro de la Batalla de Empel, hecho que ocurrió en la noche del 7 al 8 de diciembre de 1585 en Flandes, y que dio lugar a la proclamación de la Inmaculada Concepción como Patrona de los Tercios españoles, actual Infantería Española.
Además, también se han despedido de la bandera del Regimiento Galicia antiguos componentes d éste, tras su paso a la situación de reserva. Ha sido el caso del Coronel Julio Fernández Casamayor y los Tenientes Luis Zapata Paños, Javier Mateo Lorente y Gonzalo Andrés Bayo. Igualmente se han impuesto condecoraciones a 24 militares, tres con Encomiendo de la Real Orden de San Hermenegildo, cinco con la Cruz a la Constancia y dieciséis con la Cruz al Mérito Militar con distintivo Blanco.
El Coronel del Regimiento Galicia, Antonio Ortiz, en su alocución ha hecho una pequeña reflexión sobre la Infantería, que es “sufrida”. Lo “normal” de la Infantería es “la fatiga, el frío, la mojadura, el sudor, que duelan hasta las botas”. Pero también es “compartirlo todo, esforzarse sin pedir nada a cambio y haber entendido que se vive para los demás”. Continuada diciendo que “en una sociedad donde cada vez prima más el egoísmo y la comodidad, nosotros hacemos gala de un modo de ser y de vivir que no está de moda”. El Coronel también ha recordado que están animados de un espíritu que les impulsa día a día a enfrentarse a la dureza de la instrucción diaria, en un entorno duro como es el de la montaña, “que nos impulsa a enfrentarnos a cualquier obstáculo por difícil que sea”.
Respecto a los que se han despedido de la bandera del Regimiento, los ha puesto como ejemplo: “oficiales y suboficiales que han dado sobradas muestras de esos valores que nos representan y forman parte de nuestra esencia, lealtad, compañerismo, espíritu de sacrificio, disciplina, abnegación, y por encima de todas ellas, un amor incondicional a España”.
El acto militar ha finalizado con un desfile por las calles de Jaca, que ha sido muy aplaudido por la gran cantidad de público asistente, a pesar de la lluvia.
