Las carreteras autonómicas de acceso a Formigal o a Cerler estaban ayer completamente despejadas, después de tres días sin nevar. Pero, la web de la Dirección General de Tráfico las señalaba en nivel rojo, es decir, con cadenas desde el día 5. Y el domingo, la información de la DGT dio por cerrada la vía de Castejón de Sos a Benasque, único paso al valle, cuando los vehículos circulaban con normalidad.

Estos y otros errores, unidos a la prohibición de tránsito de los autobuses en tramos con cadenas, han desatado las críticas de empresarios turísticos, estaciones de esquí y transportistas, que han sufrido cancelaciones ante el temor de los turistas de no poder llegar a su destino, cuando se espera un fin de semana de sol.

La subdelegación del Gobierno en Huesca ha convocado el lunes una reunión con la Guardia Civil, responsables de carreteras de la DGA y el Estado y Tráfico. El jefe provincial de Tráfico, Andrés Fernández del Río, reconoció que en los últimos días uno de los problemas ha sido la actualización de la página web de la DGT, referencia para la mayoría de los conductores. La información de si hay o no nieve en la carretera para activar el nivel amarillo (precaución), rojo (cadenas) o negro (cerrada), parte de la Guardia Civil, pero a su vez esta la recibe de la administración competente en la vía, ya sea nacional, autonómica o provincial. «A veces la información de retorno tarda en llegar y la incidencia permanece más tiempo del debido. Vamos a tratar de solucionarlo», comentó Fernández del Río.

Otro problema que se ha detectado a raíz de este temporal es la restricción de paso para los autobuses, que ha obligado a anular rutas escolares y viajes turísticos a la nieve. El jefe provincial de Tráfico se reunió el miércoles con representantes del sector. El protocolo exige cadenas a los vehículos ligeros en el nivel rojo, pero prohíbe el paso a camiones y autobuses. Aunque lleva años funcionando, hasta los empresarios del transporte desconocían la norma. Según Fernández del Río, se estudiará la posibilidad de cambiarla, «lo mismo que ahora se deja circular con neumáticos de invierno a los turismos en lugar de con cadenas».

Uno de los transportistas más afectados ha sido Ignacio Campo, de la empresa Pirineos 3000, que lleva 20 años haciendo transporte escolar en el valle de Benasque y ha tenido que cancelar rutas tres días. «Nunca habíamos dejado de hacerlas si estaba la carretera abierta. Nuestros vehículos están preparados con cadenas y neumáticos especiales, como se hace en Finlandia o Alemania. Si persiste la prohibición, cada vez que nieve, los niños dejarán de ir al colegio», explicó. El protocolo ya existía pero el otro día la Guardia Civil le impidió pasar advirtiendo de las consecuencias de un incumplimiento.

La Asociación Provincial de Transporte de Viajeros ha pedido que se establezca una excepcionalidad allí donde la nieve es el pan de cada día en invierno. También los empresarios turísticos de Benasque apoyan a los transportistas. «Esa norma no tiene sentido porque toda la vida los autobuses han circulado con cadenas», comentó su presidente, Jorge Llanas, que también se dirigió a la subdelegación para que se dé información más precisa de las incidencias en la carretera.

Y es que también ha habido cancelaciones de viajes turísticos. La estación de Cerler sufrió ayer la de un grupo de 25 personas que iba a llegar en autobús porque desde el día 5 a las 14.43, la carretera figuraba con cadenas. «Ante el retraso de la actualización de las carreteras del valle de Benasque, en la web de la DGT compartimos unas fotos del estado de los accesos», señalaba en su Facebook, al tiempo que agradecía el trabajo de limpieza de las quitanieves. Estaciones y empresarios de otros valles también se hicieron eco en las redes sociales colgando fotografías de vías despejadas. Curiosamente, en el parquin de Cerler había 10 autobuses, que de haber respetado la norma no habrían subido. «Cada día vienen 6 o 8 autobuses y si les prohiben circular con cadenas perdemos 400 clientes», señalaron desde la estación.

La Jacetania ha sufrido igualmente las cancelaciones porque «la gente se asusta, no sabe si podrá llegar, cuando resulta que las carreteras están limpias», en palabras del presidente de la asociación empresarial, Pedro Marco.