La pugna definitiva por la alcaldía de Zaragoza podría verse abocada a pactos

El PP centra su mensaje en la bajada de impuestos y la movilidad, mientras que el PSOE apuesta por las políticas sociales. Zaragoza en Común y Ciudadanos disputan el protagonismo a los mayoritarios y CHA promete apoyar alianzas de izquierdas.

Los candidatos a la alcaldía de Zaragoza
Los candidatos a la alcaldía de Zaragoza
José Miguel Marco

Que la pugna por el Ayuntamiento de Zaragoza es decisiva parece un lugar común elección tras elección. Pero no por eso deja de ser una premisa cierta. La capital aragonesa vuelve a ser uno de los principales focos de interés de los comicios de mañana por importancia institucional, su peso demográfico, su impacto en los pactos globales y el efecto que tiene la ciudad en la concreción del abanico político aragonés. Y lo hace en un contexto incierto por la llegada de los partidos emergentes. Se dibuja un panorama sin favoritos claros y abocado a variables múltiples de pactos entre las distintas fuerzas que logren representación.


Convocados por HERALDO, los siete candidatos con más opciones de lograr escaños, se reunieron el martes en la calle Alfonso, a un paso de la plaza del Pilar en la que se ubica la casa consistorial. Fue una pausa breve en el fragor de la campaña, que sirvió para que los veteranos se volvieran a ver las caras y para que los candidatos noveles se presentaran a sus adversarios. Y también para fijar los últimos mensajes de una carrera electoral marcada por la incertidumbre.

La campaña de los mayoritarios, PP y PSOE, ha estado marcada por el afán de movilizar a sus propios electorados frente al ascenso de los nuevos partidos o coaliciones. Con las encuestas en contra, populares y socialistas han hecho una lectura en clave local, para contrarrestar el tirón nacional de los partidos emergentes.


Tras quedar a un puñado de votos de la mayoría absoluta en el año 2011, los populares encaran la cita con las urnas con el objetivo de ser la fuerza más votada y con la promesa de forjar acuerdos con partidos moderados. "Es importante que se sepa que votar al PSOE y a Zaragoza en Común, que es IU en su mayor parte, es lo mismo; es volver a votar al tripartito de izquierdas y a todos sus errores", comenta el candidato del PP, Eloy Suárez.


En una campaña en la que el PP ha insistido en que "los ciudadanos eligen a su alcalde, y no otra cosa", su mensaje se ha centrado en lo local, especialmente en los impuestos y la movilidad. "Vamos a bajar los impuestos y no vamos a hacer la línea 2 de tranvía porque tenemos una alternativa mucho mejor que es el Tranbús", anuncia Suárez, que insiste en que "si en Zaragoza vuelve a gobernar la izquierda, habrá una subida del IBI de 42%". "Somos el único partido que en esta campaña ha dicho la verdad a la gente y ha hablado claro en pactos, impuestos y movilidad", afirma.


Carlos Pérez Anadón sustituye al actual alcalde, Juan Alberto Belloch, como candidato socialista. Evita hablar de pactos, pero el PSOE busca ser el partido que lidere los acuerdos con las fuerzas de izquierda. Defiende que su proyecto "es sólido", basado en 10.000 propuestas recogidas entre los ciudadanos. Y centra su mensaje en las políticas sociales: "Los últimos informes de la OCDE destacan la brecha social. Por eso, seguiremos ayudando a los más vulnerables para lograr una recuperación económica justa, con igualdad", asegura.

El aspirante socialista cree que la experiencia es uno de los valores de su candidatura. "Tenemos que tomar a Zaragoza en serio. Somos la quinta ciudad de España y no podemos dejarla al pairo de experimentos. Necesitamos proyectos claros, sólidos, experiencia, sensatez. Tenemos que gobernarla con razón y con corazón", comenta Pérez Anadón.


La tercera fuerza política municipal es CHA, que anuncia que solo apoyará un pacto entre las fuerzas de izquierdas. "Hemos hecho una campaña en torno a la coherencia, la experiencia, las ideas concretas para problemas concretos y la audacia. Y evidentemente la izquierda con y para Zaragoza", dice su candidato, Juan Martín. Añade que "es importante aclarar los pactos porque no podemos perder tiempo, no puede pasar lo de Andalucía". Y cuestiona el papel jugado en campaña por los nuevos partidos. "¿Por qué no han querido hablar de los problemas de Zaragoza y se han movido en los lugares comunes?", apunta.

El papel de los emergentes

En esta ocasión, un partido en alza (Ciudadanos) y una coalición inédita (Zaragoza en Común) disputan el protagonismo a los mayoritarios. No solo pueden ser determinantes en la configuración de los pactos, sino que en un panorama incierto no descartan incluso el ‘sorpaso’ a los mayoritarios. Es el caso de Zaragoza en Común, marca con la que se presenta IU junto a otros partidos minoritarios de izquierdas y que ha conseguido el apoyo de Podemos, cuyo tirón quiere rentabilizar.


Su candidato, el abogado Pedro Santisteve, dice que Zaragoza en Común "es la única fuerza con capacidad para transformar las relaciones de los vecinos con el Ayuntamiento". Su origen vinculado al activismo es, según Santisteve, "garantía de transparencia y buen hacer" y considera que "el primer elemento clave es hacer frente a la emergencia social con medidas de urgencia para paliar el empobrecimiento de la gente".


Por su parte, Elena Martínez, de Ciudadanos, transmite un mensaje "de ilusión y esperanza por ese cambio responsable, que coloca a los zaragozanos y zaragozanas en el centro de la actividad política". Se aferra a la "línea roja" de la defensa de "la calidad de los servicios públicos básicos" y a uno de sus eslóganes de la campaña: "Imposible es solo una opinión".


Por su parte, el PAR y UPyD aspiran a lograr representación en el Ayuntamiento. Xavier de Pedro, candidato aragonesista, dice que mañana Zaragoza "puede salir del parón absoluto". "Tenemos un proyecto muy serio para revitalizar los barrios y el comercio, para dar un cambio a Zaragoza", asegura. Jesús López, de UPyD, pide a la ciudadanía "que no se deje engañar por formaciones que son reciclado de lo viejo con una cara bonita y nueva, sino que compre el producto original", en referencia a su partido.


Pero los mensajes no despejan las dudas. ¿Cuál será la fuerza más votada? ¿El PP lograra su objetivo de frustrar una alianza de los partidos de izquierda y forjar pactos con las formaciones moderadas? ¿Sumarán PSOE, CHA y Zaragoza en Común? ¿Y si esto se produce, cuál de estos tres grupos será el más votado y por lo tanto logrará pilotar los acuerdos? ¿Entrará el resultado de la capital en el juego de los pactos globales? Las respuestas, a partir mañana.