La DGA ha sellado un compromiso con el Centro de Investigación de Recursos y Consumos Energéticos (CIRCE) con el objetivo de “crear empleo respetando la ecología”, impulsando lo que definen como 'Econoinnovación'. De momento no hay cifras concretas de inversión, pero las partes aseguran que la iniciativa generará puestos de trabajo “considerables” en la región por las grandes oportunidades del sector.

“Es un concepto amplio, que implica inversiones para cambiar métodos, conceptos y productos”, ha explicado el director del CIRCE, Antonio Valero, quien añadió que el objetivo principal de la 'Estrategia aragonesa para la Ecoinnovación Empresarial' es que las empresas sean más eficientes, “que ahorren y así puedan ser más competitivas”.

Según él, ahorrar en agua, energía o disminuir los residuos es posible si se conocen los procesos. Con ellos, se mejoraría el funcionamiento de los interesados, que pueden ser “de todos los sectores productivos de Aragón”. De momento, asegura que se ha comenzado a “identificar a los agentes (empresas, centros de investigación, organismos...) para saber con qué se cuenta, unir fuerzas y coordinar esfuerzos”.

Afirma que se deben conocer con exactitud las ayudas europeas, nacionales y regionales para estimar el capital que podrá tener el proyecto. “En unos cinco meses eso tiene que estar definido”, informa Valero, que asegura tener el respaldo completo del Departamento de Innovación y Nuevas Tecnologías del Gobierno de Aragón.

El consejero, Modesto Lobón, ha certificado el compromiso de colaboración y anunciado que habrá una mesa de trabajo conjunta con el CIRCE. “Se puede hacer de Aragón una ecorregión, que no existe todavía, y tenemos todos los mimbres para hacerlo", declaró.Ejemplos concretos

“La cementera de Morata de Jalón se gasta un pastón en combustibles y la fracción resto (residuos) del vertedero de Zaragoza se podrían utilizar para producir ese cemento. Es un ejemplo de innovación que reduce costes, aumenta la competitividad y ayuda al medio ambiente”, comenta el director del CIRCE.

La idea, explica, es cambiar la relación materia prima – producto – residuo – vertero, por un ciclo que lleve el material de vuelta a la cadena, por medio del reciclaje. “Hay que diseñar para reciclar”, dice Valero.

Uno de los casos más exitosos de 'Econoinnovación' son las electrolineras, en las que Aragón es puntero a nivel mundial, aunque “cualquiera puede llevar su negocio a nivel internacional” si se lo propone.

El sector de la construcción, sobre todo en lo que a rehabilitación energética se refiere; el campo, con los biocarburantes; las energías (fotovoltaica, eólica, biomasa); o el tratamiento de residuos, son nichos sin explotar aún en la Comunidad y representan una “gran oportunidad de negocio”.