El caso de La Muela tuvo su dosis de protagonismo en la inauguración del segundo congreso Municipia sobre los 30 años de ayuntamientos democráticos, que se inauguró ayer en la Diputación de Zaragoza (DPZ). El presidente de la institución, Javier Lambán, mencionó este "desagradable episodio de corrupción", para después reclamar que se defina el crecimiento del área metropolitana de Zaragoza y se adecue el tamaño administrativo de los ayuntamientos a los intereses que pueden confluir en ellos.

Lambán mostró su convencimiento de que la Diputación General de Aragón, la DPZ y el Ayuntamiento zaragozano tienen que "ocuparse seriamente" de delimitar "hasta dónde llega" el entorno metropolitano y "hasta dónde deben organizarse los influjos de la ciudad", para que estos no entren en colisión con el tamaño administrativo de los municipios del entorno, en ocasiones demasiado pequeños para los intereses económicos que aglutinan. No obstante, matizó que Zaragoza puede ser un "motor de desarrollo", no solo "para el entorno inmediato" sino también para "la periferia".

Pero fue más allá. El presidente de la DPZ y alcalde de Ejea de los Caballeros abogó por "ajustar" el "tamaño administrativo" de las corporaciones locales para así "evitar" posibles "irregularidades". Recordó que en alguna ocasión ya se ha hablado sobre la creación de "consorcios". Además, Javier Lambán demandó que el Gobierno aragonés y las Cortes actualicen cuanto antes las directrices regionales de ordenación del territorio.

Mientras el dirigente socialista mencionó el tema de La Muela con nombres y apellidos, el presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, no se refirió a él ex profeso. Sin embargo, Iglesias si fue contundente al asegurar que "el Gobierno de la comunidad autonóma no controla a los ayuntamientos, ni lo debe hacer ni lo puede hacer", en alusión a las peticiones de intervención en la corporación muelana.

Una vez más el presidente autonómico fue discreto y cauto en torno a la Operación Molinos. Reiteró la defensa acérrima que ha venido haciendo de la autonomía municipal como "un derecho que tenemos que defender todos los que hemos entendido que es mejor que existan varios poderes independientes que pocos poderes concentrados". Cabe recordar que el propio Lambán propuso disolver el Consistorio y constituir una gestora, unas declaraciones que en su día cayeron como un jarro de agua fría en las filas socialistas.

"Los ayuntamientos responden ante sus plenos, antes sus asambleas, ante los ciudadanos y así es como queremos que sea. Es un modelo que apoyamos y de cuyo funcionamiento estamos convencidos", afirmó Iglesias.

Asimismo, el presidente aragonés insistió en que "vivimos y seguiremos viviendo en un mundo de poderes escalonados que no están supeditados unos a otros. No se controlan unos a otros".