La alcaldesa es tan polifacética que no solo pinta, escribe y se atreve a ser la actriz protagonista de un culebrón adaptado a ella, sino que ahora muestra que también tiene mano (o cámara) para la fotografía. María Victoria Pinilla, regidora de La Muela, fue ayer la protagonista ausente de la apertura de una exposición en la que se recogen sus mejores instantáneas. Sorprende que todas estén fechadas en el año 2009 (cuando Pinilla pasó cuatro meses en prisión) y, aún más, que estén a la venta.

Las 137 imágenes se presentan en dos formatos diferentes y pueden adquirirse por 60 euros, las pequeñas, y 80 euros, las grandes (paspartú incluido). Si Pinilla consiguiera vender todas podría obtener entre 8.220 y 10.960 euros (suponiendo que todas fueran del formato pequeño o del grande). Quizás, ella sí haya hecho el cálculo exacto. En cualquier caso, no deja de sorprender otro aspecto: que la alcaldesa utilice como medio de difusión y venta de su obra el centro cultural (espacio público inaugurado por ella misma en 1995).

Quizás, por eso, como dueña de las fotografías y alcaldesa del municipio, hubo que solicitar permiso para hacer la foto (la que se puede ver sobre estas líneas). Su hermana fue la encargada de hacer la gestión por vía telefónica (aunque no esté clara la relación entre el vínculo sanguíneo y la 'propiedad' de un centro público). Y finalmente Pinilla lo autorizó.

"Ella no viene hoy", dijo su hermana, una de las primeras en acudir a la muestra, solo por detrás del hijo pequeño de la alcaldesa. Y fue la protagonista ausente porque aunque los visitantes llegaba con cuentagotas, siempre está bien conocer la obra de manos de su artista.

Aunque grosso modo es fácil sacar algunas conclusiones. Criterios técnicos aparte, la temática estaba clara: paisajes, animales y toros.

Todas sus pasiones unidas bajo un mismo techo. Viajes a Argentina, República Dominicana y alguna que otra isla paradisíaca; imágenes de perros, caballos, aves, toros y toreros; flores y, como no podía ser de otra forma, cinco fotografías de los parques eólicos de La Muela.

Molinos que dieron fama y dinero al municipio (convirtiéndolo en uno de los más ricos de la comunidad) y unas aspas que también colocaron al pueblo en el centro de todas las miradas desde el pasado marzo, cuando a la mayor operación policial contra la corrupción urbanística en Aragón se le bautizó 'Operación Molinos'.

La alcaldesa es una de las principales imputadas (la acusan de once delitos relacionados con la corrupción), aunque no fue la única del equipo de gobierno ni tampoco de quienes trabajan dentro de la Casa Consistorial. Pinilla fue detenida el pasado 18 de marzo y tras sus primeras declaraciones pasó cuatro meses en la cárcel de Zuera.

Cuando salió de la prisión, dijo haber tenido mucho tiempo para reflexionar y, de hecho, en su primer pleno tras la vuelta al despacho municipal dejó helado al público con la frase "Alguien me dijo que la obra más bella en la vida es ayudar y servir a los demás". Y poco después volvió a sorprender en otra sesión con una cita del escritor brasileño Paulo Coelho.

Política y fotógrafa 'caprichosa'

En los más de veinte años que Mariví (como la conocen sus amigos) lleva al frente del Ayuntamiento, muchos han sido los que la han definido como una política caprichosa. Y, seguramente, estos también la calificarían como una fotógrafa caprichosa. Porque lo que muestra en sus imágenes es también lo que han sido sus principales proyectos para el municipio.

Le gustan los toros y construyó una plaza. Y hasta la cubrió. Ahora, ha fotografiado toros. Y toreros. Amante de los animales, encargó un 'aviapark', uno de los zoológicos más grandes de la Comunidad. Y alguna rapaz también se ha convertido en la mirada de su objetivo. Tiene caballos y perros. Y también los ha fotografiado. Lo mismo, con uno de sus destinos favoritos: República Dominicana, donde ha pasado muchas vacaciones en una villa de una de las urbanizaciones más exclusivas del mundo.