Caser y Mapfre dejan Muface y 15.000 aragoneses deben cambiar de compañía

Alrededor de 15.000 aragoneses, adscritos a Muface -Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado- tendrán que cambiar de compañía de seguro durante las próximas semanas, ya que las firmas Caser y Mapfre no prestarán servicios a esta mutualidad a partir de 2010. Muface ha empezado a remitir una carta personalizada a todos los afectados para que cambien a una de las entidades concertadas (se han presentado al convenio Adeslas, Asisa, DKV y Icamq-Santander) o incluso se les da la posibilidad de adherirse a la Seguridad Social.

A Muface solo pueden afiliarse los funcionarios del Estado (principialmente, sanitarios, docentes o personal administrativo de los servicios del Estado). No se encuentran adscritos los trabajadores de la Administración Local o los de organismos autónomos (ambos pertenecen al régimen general de la Seguridad Social).

Solo a Caser (que llevaba en Muface desde el año 1997) pertenecen 8.500 aragoneses y, aunque Mapfre no ha querido facilitar de manera oficial estos datos, según ha podido saber este periódico, entre las dos aseguradoras podrían estar afectadas casi 15.000 personas.

Según información de Muface a través de su página web, Mapfre Familiar, Caser y la Nueva Equitativa no han suscrito el convenio sanitario con Muface para la campaña 2010-2011 por cuestiones de "índole estrictamente empresarial" y "ajenas a la mutualidad", apuntan.

Reconoce, no obstante, que este hecho afecta a una cifra importante de mutualistas titulares repartidos por toda España. "Debe destacarse que el nuevo concierto no solo no significa una merma de la calidad de la atención prestada, sino que su contenido incluye toda una serie de requisitos y controles que incrementan notablemente las garantías para los mutualistas", añade en la web.

Sin embargo, diversas fuentes consultadas por este periódico, apuntan a que la razón por la que estas y otras compañías han abandonado Muface durante los últimos años es por la poca rentabilidad económica de este negocio, ya que obtienen mucho más beneficio de las pólizas privadas. De hecho, otras aseguradoras han decidido también dejar la Mutualidad de los funcionarios del Estado y no se han presentado a los últimos convenios.

Para intentar facilitar a los afiliados el cambio de compañía aseguradora, Muface envió a principios de noviembre una primera carta, en la que se informaba de los pasos a seguir, las modalidades (por internet, presencial o por correo) y los tiempos a los que deben ajustarse para hacer el cambio de compañía.

Muface volverá a remitir esta misma misiva durante este mes, para informar además al asegurado del derecho a ser atendido por la entidad a la que está adscrito, incluidas Mapfre y Caser, hasta el 31 de enero de 2010 o en caso de hospitalización o maternidad hasta el alta del respectivo proceso.

Ante el elevado número de afiliados afectados y con el objetivo de minimizar las molestias, Muface tiene previsto reforzar las áreas de trabajo de los servicios provinciales y oficinas delegadas por toda España.

Cambio de cuadros médicos

Además de las consiguientes molestias originadas por la necesidad del cambio de compañía, a algunos afiliados que pertenecían a Caser y Mapfre se les plantea otro conflicto. No todas las aseguradoras trabajan con los mismos cuadros médicos, por lo que algunas personas se ven en el dilema de tener que renunciar al médico de toda la vida al verse obligado por este hecho a dejar su aseguradora.

"Ahora, tendré que pensar cuál me conviene más, porque estaba acostumbrado a trabajar con Caser y con los médicos que pertenecen a ella", aseguró un facultativo de Zaragoza, que hacía unos días había recibido una carta de Muface en la que se le comunicaba que su compañía ya no pertenece a Muface. Incluso algunos otros funcionarios consultados están estudiando la posibilidad de agregarse al régimen de la Seguridad Social para evitar más problemas por los futuros cambios de aseguradoras.