Goya a tutiplén: de una carta desaparecida a la caligrafía de los grabados
Este fin de semana se puede aprender sobre la vida del pintor de Fuendetodos y la Zaragoza de la época en una plaza del Pilar convertida en un 'museo' al aire libre.
La cita es a las 11.00 a las puertas del Museo Pablo Gargallo de Zaragoza. Don Leandro, jefe de la patrulla El Péndulo, una atemporal agencia de detectives especializada en resolver misterios de la historia del arte, y Cayetana, responsable de vestuario del equipo, explican a las personas que han acudido que existe un manuscrito de Francisco de Goya perdido que escribió a su gran amigo Martín Zapater y que el Ayuntamiento quiere recuperar. Ellos tendrán que intentar localizar la carta y verificar su autenticidad a través de un juego de pistas con el que recorren las calles y comprueban que los hechos que se rememoran en el documento son verídicos.
Los ayudantes de estos sabuesos visitan hasta seis lugares y se van topando con otros singulares detectives como Leocadia (personaje basado en el ama de llaves durante los últimos años de la vida del genio de Fuendetodos), el propio Martín y Saturna, una agente que lleva años en prácticas.
Las 250 plazas para participar en el juego se agotaron el jueves por la noche. "En las banderolas que marcan las pistas del mapa hay un código QR en el que se puede acceder a más información sobre Goya y el mapa didáctico abarca hasta 16 puntos de interés para que la gente los pueda conocer de forma más reposada", explica Javier Vázquez, uno de los creadores de esta actividad.
Yolanda López y Miguel Moraleda, junto a su hija Laura, esperaban a las 11.30 que comenzara la visita teatralizada 'Los sueños de Goya' junto a la fuente que lleva el nombre del pintor. "Somos de Zaragoza, pero siempre viene bien saber un poco más de Goya y empaparte de cultura", señala Yolanda. Para Laura, que estudia 2º de Bachillerato, era la mejor excusa "para dejar de estudiar un rato, y hacer algo distinto, porque con la Evau encima hay tensión". Tienen claro que no van a perderse el videomapping que se proyectará sobre la fachada del Ayuntamiento y el espectáculo piromusical con el que el domingo se despedirán las Fiestas Goyescas.
Comienzan las explicaciones sobre Francho, como llamaban familiarmente a Goya en su casa, asegura la guía. La sorpresa llega cuando una auténtica maja, de las que merendaban a orillas del Manzanares, aparece en escena para demostrar que conoció al culpable de que su rostro estuviera en uno de los cuatros colgados en el comedor de palacio.
Entre el medio centenar de actividades programadas durante el fin de semana está el taller de caligrafía histórica 'Las letras goyescas' a cargo del maestro calígrafo Ricardo Vicente. Cualquiera a partir de 9 años puede intentar aprender a trazar esas redondeadas y algo alargadas letras tan utilizadas en los grabados. Además, con el sol brillando después del mediodía apetece sentarse bajo la protección de una sombrilla. Los alumnos utilizan plumas metálicas de punta cuadrada, antes hechas de cañas de avestruz, milano o buitres como las que enseña Ricardo. La tinta está hecha con nogalina, cuando en la época de Goya "sería con el hollín de la vela o el candil", explica.
Los aficionados a pintar tienen un rincón a su medida en el muro de arte para jóvenes que Sergio Muro y María Horno han creado frente a la Delegación del Gobierno. A lo largo de los paneles verticales blancos están trazadas algunas de las obras más conocidas de Goya, como 'El quitasol', 'La familia de Carlos IV', 'Los fusilamientos del 2 de mayo', su retrato y varios personajes de sus pinturas negras.
Sergio anima a la gente a que les dé color, pero este sábado, de momento, los más pequeños, el público mayoritario, prefiere dar rienda suelta a su imaginación pintando en las mesas. "Se agradece que organicen actividades que se puedan hacer en familia, sobre todo los fines de semana. En plan paseo íbamos a comprar al Mercado Central y unos amigos nos han dicho que estaban aquí y nos hemos acercado. No sé si al final llenaremos o no el carrito", contaba Merche Medina que estaba con sus hijas Alma y Alexia.
El genio de Fuendetodos es un elemento clave en la proyección exterior de Zaragoza y a algunos turistas estas Fiestas Goyescas les han cogido por sorpresa. Un grupo de peregrinos de Puerto Rico que están recorriendo los santuarios marianos se topaban con ellas al salir de la basílica. Una oportunidad para conocer un poco más su figura y para que Mabel se preguntara qué hay detrás de ese grabado titulado 'Murió la verdad'.
