El Inaga autoriza seis plantas solares en Sabiñánigo pese al veto municipal a las renovables
Enerland pidió medidas cautelares para seguir tramitando#los permisos mientras el juez resuelve su recurso a la moratoria.
El Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga) ha autorizado las seis plantas solares fotovoltaicas que la compañía Enerland pretende instalar en Sabiñánigo pese a la moratoria aprobada por el Ayuntamiento a principios de año.
La promotora aragonesa solicitó medidas cautelares al juez para seguir tramitando las preceptivas autorizaciones a la espera de que resuelva el recurso que ha presentado contra el veto a las renovables. Su pretensión es cumplir los hitos fijados por el Ministerio para la Transición Ecológica para no perder los avales depositados mientras se dilucida el frente judicial abierto.
Las declaraciones de impacto ambiental del Inaga han sido positivas tanto en el caso de las seis plantas solares como en la línea de evacuación, aunque el Inaga ha impuesto el soterramiento del único de los tres tramos del tendido que se planteaba que fuera aéreo, de casi dos kilómetros de longitud.
El conjunto supone una potencia de 49,9 megavatios y la ocupación propuesta alcanza las cien hectáreas de suelo de cultivos de secano.
Como informó este diario, los ayuntamientos de Sabiñánigo y Jaca tramitaron una modificación en sus Planes Generales de Ordenación Urbana (PGOU) para prohibir de facto la construcción de plantas solares. En el caso de la capital del Alto Gállego, la moratoria impide las placas solares a 500 metros a ambos lados de la autovía A-23 y limita su instalación a zonas inviables para este uso.
La aprobación inicial fue ratificada por el Consejo Provincial de Urbanismo en abril tras subsanarse las deficiencias denunciadas por Enerland, como incoherencias relativas a la normativa, la falta de informes preceptivos, errores numéricos y la existencia de planos sin firmar. No obstante, la moratoria en la concesión de licencias se mantuvo durante los tres meses que se dieron de plazo a los ayuntamientos para subsanar las deficiencias si querían lograr la aprobación definitiva, como así fue.
La moratoria afecta, en total, a nueve proyectos de Sabiñánigo que supondrían la ocupación de más de 250 hectáreas, ya que hay otros dos afectados de la compañía aragonesa Atalaya y la madrileña Sunco Capital.
Las solicitudes de evaluación ambiental de Enerland se presentaron a finales de 2021 y las resoluciones del Inaga, que ahora está haciendo públicas en el Boletín Oficial de Aragón (BOA), están fechadas hace dos meses. Para conseguirlo, tuvieron que solicitar las medidas cautelares al juez, que estimó que podía continuar la tramitación hasta el momento de la concesión de la licencia, dado que este permiso dependerá de la resolución del contencioso sobre la moratoria. "Instamos al Inaga a resolver los expedientes para que no se vieran lesionados nuestros derechos", añadieron
Fuentes de Enerland indicaron este martes que su intención es seguir hasta el final, por lo que ahora están pendientes de lograr la autorización administrativa previa y de construcción en el plazo marcado, que al tratarse de plantas solares de menos de 50 megavatios depende de la supervisión del Ejecutivo autonómico.
La compañía aragonesa subrayaron que llegarán hasta el final porque su intención es construir las instalaciones fotovoltaicas en un municipio con industria electrointensiva. A juicio de la compañía, el Ayuntamiento ha hecho un "uso indebido" del Plan General para regular una actividad mercantil.
