El San Juan de Dios reabre su hospital de día geriátrico para llegar a 90 pacientes al año

El San Juan de Dios de Zaragoza acaba de reabrir su hospital de día geriátrico de convalecencia y rehabilitación con la intención de llegar a 90 pacientes al año, e incluso ampliar sus instalaciones a medio plazo para tratar a un número mayor de usuarios. Muchos son derivados del Miguel Servet, donde han sido intervenidos quirúrgicamente de la cadera, y necesitan ayudar para recuperar su movilidad.

"Lo que hacemos aquí es una recuperación funcional global multidisciplinar. Hacemos una valoración por parte del médico y enfermero así como tratamientos de Fisioterapia y de Terapia Ocupacional", explica el doctor José Luis Bonafonte, responsable de Geriatría.

Los pacientes acuden al centro cuatro horas por la mañana -de 9.00 a 13.00-, donde reciben "una recuperación más constante". En esas cuatro horas combinan el ejercicio físico, estimulación cognitiva y terapias grupales. Según pone de manifiesto: "La mayoría son derivados de la Unidad de Valoración Sociosanitaria del Hospital Miguel Servet, pero también tenemos capacidad para atender pacientes de nuestro propio centro, que vemos que se pueden beneficiar". Sobre todo, dice, son enfermos operados de cadera del Servet "para hacer esa recuperación global, no solamente física, que también, sino cognitiva".

Se trata de "adecuar los recursos a la persona", indica Bonafonte: "No es un perfil de paciente que deba estar ingresado, pero tampoco tiene suficiente con acudir una hora a hacer Fisioterapia. Está a mitad de camino entre la hospitalización y la Fisioterapia ambulatoria".

Tener que estar ingresados durante un mes para hacer la rehabilitación, añade el responsable de Geriatría, "aparte de que no resultaría eficiente, para ellos sería contraproducente". "Si el paciente necesita esa recuperación, se le ofrece durante su hospitalización o en un hospital de día geriátrico", apunta.

Primeras usuarias

Entre las primeras usuarias de este servicio está Isabel Led, de 78 años, que se rompió la cadera y la muñeca. Estuvo alrededor de diez días en el Servet y después pasó más de un mes en el San Juan de Dios y ahora acude tres días a la semana al hospital de día de este último centro: "Me ha ido muy bien. Cuando llegué casi no podía mover la pierna, y ahora puedo andar sola".

Irene Aznar, supervisora de Enfermería, reconoce que ha sido fácil poner en marcha este proyecto, porque el personal que había tenía "ya experiencia en el anterior hospital de día". La unidad cuenta con dos técnicos en cuidados auxiliares de enfermería (TCAE), un terapeuta, un fisioterapeuta y una enfermera.

En esta unidad se sigue el protocolo anticovid, de manera que se crean grupos burbujas y se toman las constantes y la temperatura. Diariamente acuden nueve pacientes. Hay dos turnos: uno, lunes, miércoles y viernes, donde se recibe una rehabilitación más intensiva; y otro, martes y jueves. Conforme dan altas van ingresando nuevos usuarios. El tiempo medio de estancia en el hospital de día podría ser de 15 sesiones, "pero es muy orientativo: hay gente que necesita más o menos".