La crisis independentista también ha sembrado la inquietud entre los alumnos de otras comunidades autónomas que cursan sus estudios en las universidades de Cataluña. Así se desprende de las llamadas y solicitudes de información sobre posibles traslados de expedientes y sus requisitos que están recibiendo en las últimas semanas tanto la institución académica pública de Zaragoza como la privada de San Jorge. Aunque domina la discreción, desde ambos centros reconocen que el número de este tipo de consultas que están recibiendo a estas alturas del comienzo del curso es inusual y que en algunos casos los interesados especifican que el motivo por el que quieren cambiarse es la incertidumbre que se está viviendo a raíz de la evolución del desafío soberanista.

La Universidad de Zaragoza confirma de forma genérica que están atendiendo peticiones de información sobre traslados de expedientes. Desde el gabinete de imagen y comunicación de la institución académica se limitan a comentar que solo pueden contabilizar las que han recibido por escrito, que son varias. "Las llamadas telefónicas es más difícil controlarlas y saber si son personas distintas o la misma con diferentes teléfonos", añaden.

En cualquier caso, hay que tener presente que un traslado universitario en estos momentos es harto complicado. La propia web de la Universidad de Zaragoza indica que el plazo para solicitarlo suele ser en la primera quincena de julio. Además, hay otros requisitos que se deben cumplir para continuar los mismo estudios, como es haber superado el primer curso completo en enseñanzas no renovadas, o 60 créditos en el caso de enseñanzas renovadas.

El número de consultas que se están registrando no son alarmantes, pero sí significativos de las consecuencias provocadas por la deriva separatista. Desde la Universidad San Jorge (USJ) explican que a partir de los acontecimientos políticos vividos el pasado 1 de octubre han contabilizado una decena de llamadas interesándose sobre el traslado de expediente a este centro privado desde distintas universidades catalanas de Tarragona, Barcelona y Lérida, tanto públicas como privadas. Las titulaciones a las que quieren acceder abarcan las tres facultades que alberga, Comunicación, Salud y Arquitectura y Tecnología. Desde la USJ sí especifican que las peticiones son de estudiantes de diferentes cursos, no solo de primero carrera.

Lo que no se puede asegurar es que todos los interesados sean alumnos aragoneses, aunque la lógica lleva a pensar que se trate mayoritariamente de jóvenes y familias de la Comunidad. "Las llamadas son una primera toma de contacto en la que no siempre se especifican esos detalles", manifiestan fuentes oficiales de la San Jorge. En cuanto a los trámites que se deben seguir para hacer efectivo un traslado de expediente aseguran que son "genéricos" y habitualmente se suele precisar un "reconocimiento de créditos" previo a tramitar la matrícula.

La Xunta ofrece ayuda

La situación a la que se enfrentan estos días las universidades aragonesas no es, ni mucho menos, un caso aislado. De hecho, la Xunta de Galicia, a través de su consejero de Educación Román Rodríguez, ofreció la semana pasada a los alumnos gallegos (universitarios y no universitarios) que quieran dejar Cataluña ayuda para facilitarles el traslado de sus expedientes.

En el caso de los universitarios, la propuesta de la Xunta pasaba por garantizar el apoyo necesario para llevar a cabo las tramitaciones entre las universidades y ejercer de intermediador, teniendo en cuenta la situación concreta de cada titulación y centro. Fuentes del departamento de Educación de la Xunta comentaron ayer que hasta el momento solo se han producido "contactos informales" y por el momento "no hay peticiones reales".

Desde el departamento de Universidad del Gobierno aragonés puntualizaron que no han recibido ninguna demanda sobre este tema. No se cuenta con una estimación de cuántos alumnos aragoneses estudian en la comunidad catalana. Según la estadística del curso pasado de la Universidad Autónoma de Barcelona, por ejemplo, en sus estudios de grado había matriculados 157 estudiantes procedentes de alguna de las tres provincias aragonesas de un total de 26.155 estudiantes.