Fernando Callizo: "Una declaración unilateral abriría la caja de Pandora"

El presidente de la Confederación de Empresarios de Aragón admite que en el sector existe "una absoluta preocupación" y cree que muchas firmas catalanas tienen un plan B.

Fernando Callizo, presidente de CEOE Aragón.
Fernando Callizo: "Una declaración unilateral abriría la caja de Pandora"
O. Duch

La Cámara de Comercio ha recibido ya varias solicitudes de información. ¿También ustedes?

No directamente, pero esta fuga de empresas viene ya del famoso tripartito y de aquellas modificaciones fiscales. En los últimos años ha habido bastantes movimientos. Hay empresas, sobre todo medianas, que han abierto delegaciones o que han hecho de Aragón su sede principal. Sí me consta que algunas han sondeado el polígono de Fraga o la provincia de Teruel. Las hay que lo están haciendo a través de intermediarios.

¿Cómo están los empresarios?

Existe una absoluta inquietud y preocupación en el empresariado en su conjunto. La manifestación del domingo parece haber aportado mayor tranquilidad, ya que se ha visto que son muchos también los que están en contra de la independencia.

¿Qué podría ocurrir si se declara la independencia de manera unilateral?

Hay muchísimas empresas que están a la espera de lo que pueda ocurrir. Una declaración unilateral de independencia abriría la caja de Pandora a todos los niveles.Alguna multinacional alemana ya ha paralizado todas sus inversiones en Cataluña para 2017 y 2018. Estoy absolutamente convencido de que muchísimas compañías tienen un plan B previsto y no lo dirán hasta no ver qué sucede.

¿Prevén que muchas empresas se trasladen a Aragón?

Estoy convencido de que si mañana [por hoy] se declara la independencia y el Estado activa el artículo 155 de la Constitución, esto se va a mover más. Aquí tenemos que diferenciar el traslado del domicilio social y el de la actividad. La segunda opción es muchísimo más complicada. La Caixa y el Banco Sabadell tuvieron que tomar medidas rápidas porque, al ser empresas que cotizan en bolsa, su situación podría haberse vuelto muy peligrosa, pero la industria, por así decirlo, se mueve a otro ritmo.

¿Cómo está el sector en Aragón?

También preocupado por la brecha que se está abriendo en propia sociedad catalana y en el resto de España. Evidentemente, todas las relaciones comerciales debemos entenderlas dentro de una legalidad y de un marco democrático. Preocupan, por ejemplo, los posibles aranceles, el ordenamiento jurídico, la moneda, la legislación laboral, las cotizaciones a la seguridad social... La incertidumbre es tremenda.

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