Los bomberos han realizado ya 80 suministros para garantizar el abastecimiento de agua

Los pueblos aragoneses aumentan tanto su población durante verano que algunos no pueden hacer frente a la demanda de abastecimiento de agua potable, dada la capacidad de sus depósitos. Desde el 1 de junio y hasta ayer, los bomberos de la Diputación de Zaragoza han realizado hasta 80 suministros para garantizar este servicio básico a 15 localidades. En Teruel ha sido necesario recurrir también a las cisternas en dos pedanías y en dos campamentos infantiles. Mientras que en la provincia oscense hubo que abastecer algunos núcleos de la comarca de La Hoya de Huesca antes de los meses estivales para hacer frente a un elevado nivel de nitratos en las captaciones por la sequía.

Ayer por la mañana, un efectivo del parque de Calatayud se desplazó hasta Inogés, en el término municipal de El Frasno, y también a Cabolafuente, para llenar sus depósitos. A cada municipio se llevaron 20.000 litros de agua. En el caso de Inogés, tal y como explicó la alcaldesa de El Frasno, Raquel Naranjo, "está todo seco y tienen que venir a aportarnos agua en más de una ocasión". Desde el pasado 23 de junio, cuando se solicitó por primera vez esta ayuda, los bomberos han llenado el depósito hasta en 14 ocasiones. Tenían que haber ido el lunes por la tarde para evitar que el pueblo quedara desabastecido, pero un accidente en Embid de Ariza –al que acudieron para rescatar a un hombre– impidió que pudieran completar el servicio. Los vecinos estuvieron sin agua en los grifos todo el lunes: "La gente lo llevó muy mal, pero entendemos que fue una emergencia y no pudieron venir". La situación quedó normalizada ayer. Todavía será necesaria su asistencia, al menos, los próximos dos días. Esta población, que está a ocho kilómetros de El Frasno, pasa de poco más de 50 habitantes a más de 200 en verano, según indicó la responsable local. Una tónica habitual durante estos días en el mundo rural.

El diputado delegado del Servicio Provincial de Extinción de Incendios (SPEI) de la institución provincial, Alfredo Zaldívar, indicó que "suele ocurrir con pequeños pueblos o barrios alejados que, sobre todo en verano, no pueden dar servicio suficiente ante el aumento de población". En este sentido, aseguró que "hay que estar expectantes para atender las peticiones lo antes posible". Para ello, existen cuatro nodriza. Miguel García, cabo de turno de la zona sur de Calatayud, explicó que lo más común es transportar agua en camiones cisterna para paliar la falta de abastecimiento de la red. "Que se seque el pozo es habitual en verano en algunos pueblos, porque es cuando más gente hay. Y, además, esta época está siendo especialmente seca", explicó García.

La semana pasada, desde el parque de Tarazona tuvieron que suministrar durante varios días agua a Novallas (con 871 habitantes censados), después de que la localidad se quedara sin agua a consecuencia de una serie de roturas de la tubería que abastece al depósito municipal. Entre los 80 viajes figura el suministro de agua a una urbanización ubicada en Añón de Moncayo o a la balsa de Huérmeda donde, en caso de incendio, el helicóptero puede coger agua.