Plaza desbloquea las ventas con una macrooperación de casi 200.000 metros cuadrados
Un conocido grupo español adquiere 10 hectáreas y firma la opción por otras 10 para un proyecto por ahora confidencial. La 3ª mayor transacción de su historia reportará 16 millones.
El Gobierno del socialista Javier Lambán ha logrado dar un giro radical a la plataforma logística de Zaragoza (Plaza) en tan solo seis meses. De ser una sociedad pública marcada por la judicialización y la parálisis en su comercialización a cerrar la mayor operación desde hace cinco años y una de las más importantes de su historia: casi 200.000 metros cuadrados, lo que reportará a la sociedad pública unos ingresos en torno a los 16 millones de euros.
El consejero de administración de Plaza aprobó ayer los términos del acuerdo, sujeto a estrictos términos de confidencialidad con un conocido grupo empresarial español. Este ha adquirido dos parcelas que suman 100.224 metros cuadrados en el área logística ferroviaria, junto a las macroinstalaciones de BSH, y ha firmado una opción de compra por otra de 98.157 metros en el área de futuros crecimientos, justo detrás del gigantesco almacén de Decathlon. Y este grupo no quiere esperar mucho para ejecutar esta reserva, como lo demuestra el hecho de que el plazo fijado venza en mes y medio, a finales de enero.
La operación se ha negociado en los últimos meses sin tener que recurrir a tirar los precios. La sociedad pública ha respetado su política comercial y ha vendido los terrenos por su importe de tasación.
La intención de la compañía, de la que el Gobierno de Aragón solo detalló que se dedica, entre otros negocios, a la explotación en arrendamiento de inmuebles, es iniciar en breve los trámites para levantar una nave con objetivos logísticos. Ni la presidenta de Plaza y consejera de Economía, Marta Gastón, ni el nuevo gerente, Francisco de la Fuente, dieron más detalles al consejo de administración, aunque en la DGA consideran que podría repetirse los mismos términos de la operación de Decathlon, por la que la multinacional se implantó en la plataforma en régimen de arrendamiento sobre una parcela que compró el constructor y exdueño del Real Zaragoza, Agapito Iglesias, con el objetivo de construir una nave a la medida de la firma francesa.
Aunque no se tiene ningún detalle del tipo de empresa o empresas que ocuparán los 200.000 metros pactados ni del empleo que se podría generar, la DGA destaca la trascendencia dada su superficie. De hecho, es la tercera mayor operación cerrada en Plaza, tras la de Inditex (unos 290.000 metros) y la de Pikolín (más de 250.000). Y supera con creces a la parcela que ha adquirido Amazon en Barcelona para abrir su mayor centro logístico para el sur de Europa, cuya instalación no logró atar el Gobierno de Rudi en la pasada legislatura.
Desde la DGA se destacó ayer que las dimensiones de esta operación puede servir como "elemento dinamizador de la plataforma por el previsible efecto arrastre".
Críticas a la gestión del PP
Cuando aún no había acabado el consejo de administración de Plaza, la DGA hizo pública la venta y el presidente aragonés la valoraba ya como una "excelente noticia" que reflejaba "un cambio de tendencia en la logística aragonesa y en la actividad desarrollada por los nuevos gestores de la plataforma". Esto lo puso como contrapunto a la "paralización" de los cuatro años anteriores, cuestionando que se utilizara Plaza "para otras cosas en las que no voy a entrar", en referencia a la judicialización inicada a mediados de 2013 tras la denuncia del exgerente, Jesús Andreu, por la presunta malversación millonarias en las obras de urbanización.
