El puerto de Monrepós (N-330), como era previsible, volvió a convertirse en una trampa para los conductores que regresaban de pasar el puente de la Constitución en el Pirineo. El sábado ya se generaron retenciones en la operación salida y ayer se repitieron.

Los primeros atascos pillaron desprevenidos a los conductores que habían adelantado la vuelta precisamente para evitarlos. Comenzaron a las 12.15 entre Sabiñánigo y Arguis debido a la avería de dos vehículos en el carril derecho cerca del Alto de Monrepós. Esta incidencia se dio por concluida sobre las 13.30, pero media hora más tarde la situación volvía a complicarse, cuando en ese momento el tráfico procedente de los valles pirenaicos se intensificaba.

Esta vez las retenciones se prolongaron más de cuatro horas, hasta las 18.15, y provocaron siete kilómetros de cola en la cara norte del puerto, entre Caldearenas y Sabiñánigo, según fuentes del Centro de Gestión de Tráfico. Algunos conductores que sobre las 16.00 regresaban desde Jaca comentaban que estuvieron 20 minutos totalmente parados en el alto de Monrepós.

El buen tiempo ha llenado el Pirineo, de forma que también otras carreteras, entre ellas los accesos a Benasque y al valle de Tena registraron ayer tráfico intenso en la vuelta.

Además, los cuatro días festivos se saldan en Aragón con dos víctimas mortales en la carretera. Ayer hubo otro accidente, el atropello de un peatón de 84 años en Ballobar. Aparentemente tenía heridas leves, pero fue ingresado en el hospital Arnau Vilanova de Lérida. Según la Guardia Civil, una conductora que viajaba en un Audi junto a otras dos personas y que circulaba a poca velocidad, arrolló al hombre en el acceso a una estación de servicio. El accidente ocurrió en el kilómetro 16.500 de la A-131 (Fraga-Huesca).